CANCÚN, QR.- Un juzgado federal en Quintana Roo concedió un amparo a residentes del municipio Benito Juárez, invalidando el Plan de Desarrollo Urbano aprobado en 2022 por el cabildo de Cancún. La resolución obliga a reponer todo el procedimiento, comenzando desde su elaboración, y a incluir mecanismos efectivos de consulta pública y acceso a la información ambiental.
El recurso legal, promovido por ciudadanos con el respaldo de la organización Defendiendo el Derecho a un Ambiente Sano (DMAS), señala que el instrumento urbanístico vulnera el derecho humano a un medio ambiente sano y la seguridad jurídica, conforme a lo dispuesto en los artículos 14 y 16 de la Constitución mexicana. La sentencia judicial también reconoce el interés legítimo de los promoventes, así como la necesidad de revertir la carga de la prueba y priorizar la participación ciudadana, reporta El Economista.
También te puede interesar:Grupo de niños de Bacalar derrota a la Sedena

La jueza Angélica Ortuño, quien resolvió el juicio de amparo 995/2022, determinó que el Plan de Desarrollo Urbano debe dejarse sin efectos. La autoridad municipal está obligada a garantizar el acceso oportuno y comprensible a la información desde la etapa inicial del proceso de planeación, así como a asegurar una participación real de los habitantes de Benito Juárez en su formulación y aprobación. El fallo también requiere incorporar las opiniones de sectores subrepresentados y promover el aprendizaje entre todos los actores involucrados.
Plan de Desarrollo Urbano deberá incluir movilidad y atlas de riesgo

La sentencia ordena además que el Congreso estatal incluya planes de movilidad y un atlas de riesgo en la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano. Estos documentos deberán integrarse en la elaboración del próximo Plan de Desarrollo Urbano, y el nuevo instrumento deberá reflejar los señalamientos de la ciudadanía antes de su aprobación.
A través de sus redes sociales, la asociación DMAS difundió un mensaje en el que celebró la sentencia, afirmando que se trata de una resolución completa, fundamentada y actual. Señalaron también que el fallo reconoce la importancia de la participación ciudadana y establece con claridad los pasos que deben seguir las autoridades responsables para acatar la sentencia, informa Caribe Penínsular.
En enero, DMAS y vecinos de la supermanzana 15 de Cancún realizaron una presentación pública para mostrar inconsistencias entre el Plan de Desarrollo Urbano que se sometió a consulta y el que finalmente fue aprobado. Según expusieron, en el documento final se eliminan equipamientos deportivos para dar paso a espacios recreativos no definidos, y se autoriza mayor altura en desarrollos hoteleros dentro de la zona turística.
En esa misma revisión ciudadana, también se denunciaron cambios en claves de uso de suelo que permiten nuevas construcciones en zonas de playa, como en el lote con clave TH/8/N, que habilita la edificación de un hotel de ocho pisos. La organización también documentó que, desde 2021, existen al menos 19 puntos de descarga ilegal de aguas negras sobre humedales y manglares por parte de negocios en la zona hotelera, lo que agrava la situación ambiental.
El sistema de alcantarillado en esa franja costera tiene más de cuatro décadas de antigüedad, y presenta fallas estructurales, colapsos, taponamientos y una capacidad insuficiente para las demandas actuales. De acuerdo con el estudio realizado por AyMA Ingeniería y Consultoría, la calidad del agua en Cancún va de regular a mala, con altos niveles de enterococos fecales en cuerpos de agua protegidos como los Manglares y la laguna de Nichupté, de acuerdo con Caribe Penínsular.
A pesar de contar con estos datos desde hace al menos dos años, las autoridades municipales no corrigieron las deficiencias señaladas, y aprobaron el Plan de Desarrollo Urbano en junio de 2022, aumentando las densidades urbanas y asignando usos turísticos a playas públicas. DMAS ha insistido en que estas modificaciones agravan el deterioro en la infraestructura de la ciudad, especialmente en las áreas más presionadas por el crecimiento inmobiliario, como la zona hotelera .
Esta resolución judicial representa el segundo revés para el Plan de Desarrollo Urbano en menos de tres años. En 2022, otro juzgado había concedido una suspensión parcial del documento, limitada a zonas con humedales y manglares, pero sin efectos generales. En esta ocasión, el fallo abarca todo el instrumento y ordena su reposición total, informa El Economista.