Staff | R360
Las consultas indígena y ciudadana, realizadas el 15 de diciembre, en mil 400 comunidades indígenas y 84 municipios de los cinco estados en los que se ha trazado la ruta del Tren Maya, dieron un sí mayoritario a la implementación de este proyecto, el más importante del sexenio del Presidente Andrés Manuel López Obrador, para el Sureste de México.
Sobre la Consulta Indígena que decidiría el futuro del Tren Maya en mil 400 comunidades ubicadas en el trayecto, Adelfo Regino Montes, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), informó hoy, durante la conferencia de prensa del Presidente Andrés Manuel López Obrador, en Palacio Nacional, que hubo un consenso unánime de implementar el proyecto más importante del sexenio en el Sureste de México.
También te puede interesar: Dignatarios mayas vuelven a la “guerra”
Regino Montes detalló que después de 30 asambleas regionales informativas (en las que hubo diversas peticiones), en 15, participaron 4 mil 800 comunidades previo a la Consulta Indígena; el fin de semana se realizaron 15 asambleas regionales consultivas con una participación de cinco mil 237 autoridades y representantes indígenas de 987 comunidades indígenas (una participación del 70% de las comunidades convocadas).
El titular del INPI consideró que el desarrollo de la Consulta Indígena ha sido una jornada histórica debido a la diversidad étnica y cultural del Sureste del país; por la extensión territorial del programa y por la cantidad de población consultada.
Regino Montes entregó a López Obrador las 15 actas de las asambleas regionales informativas en las que constan los acuerdos de las comunidades y las 15 actas de las asambleas regionales consultivas, en las que consta la voluntad de las comunidades de apoyar la implementación, así como los acuerdos y conclusiones que hubo en cada una de las asambleas.
CONSULTA CIUDADANA
Diana Álvarez Maury, subsecretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación, por su parte dio a conocer los resultados de la Consulta Ciudadana del Tren Maya, realizada en 84 municipios por donde pasará el tren: nueve municipios en Campeche, cuatro, en Chiapas; 10, en Quintana Roo; tres, en Tabasco; y 54, en Yucatán. De 269 mesas, se instalaron 268.
Álvarez Maury dijo que hubo mucho entusiasmo de quienes participaron en los cinco estados. De los resultados, dijo que 93 mil 142 votaron por el sí (92.3%) y por el no siete mil 527 (7.4%).
Nos congratulamos por la participación de este ejercicio de democracia participativa, dijo la funcionaria.
Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), informó que los trabajos de licitación iniciarán la primera semana de enero, e inicio de obras entre marzo y abril de 2020.
López Obrador señaló que Fonatur está encargado de la construcción del Tren Maya y agregó que la licitación de enero será en los tramos donde ya hay ingeniería básica. Hizo un llamado a las empresas para que se vayan preparando.
Jiménez Pons detalló, a petición del Presidente, que los tramos donde hay ingeniería básica, de los mil 460 kilómetros que es la extensión del Tren Maya, 760 cuentan con vía existente.
López Obrador por último confirmó que ya se cuenta con el presupuesto para echar andar el proyecto, “alrededor de 120 mil millones de pesos, de los cuales ya se tienen 60 mil millones seguros, por los ingresos que se obtienen por el cobro de impuestos a turistas. Este dinero se usaba para supuestamente promover el turismo y se demostró que no se le daba ese uso; la mayor parte se usaba para pagar publicidad a empresas informativas o de comunicación. Ese fondo de ocho mil millones de pesos al año se utilizará para la construcción de esa obra. El resto, los otros 60 mil millones serán financiados con el presupuesto público, no será deuda ni los sistemas de asociación que cuestan mucho, con financiamientos onerosos”.
El coordinador nacional de Medio Ambiente del Partido Acción Nacional, Riult Rivera, dijo que ese partido se pronuncia en contra de la consulta “ya que se realizó sin la intervención de un organismo autónomo e independiente, es decir, esta consulta no contó con garantías de imparcialidad; aparte las y los pobladores no tuvieron la información objetiva para decidir de manera consciente, lo que se traduce como una acción antidemocrática”.
