CANCÚN, QR.- Un ecoladrillo es una alternativa sostenible para reutilizar residuos plásticos y evitar que contaminen el medio ambiente.

Para hacer un ecoladrillo, sigue estos pasos:

  1. Botellas de plástico limpias y secas con tapas (preferiblemente PET, como botellas de agua o refrescos).
  2. Palos o palillos para compactar los desechos.
  3. Tijeras o cuchillo para cortar el plástico si es necesario.

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Pasos para hacer un ecoladrillo:

  1. Selección del plástico: Escoge botellas de plástico limpias y secas. Es importante que estén sin etiquetas ni tapas de metal, ya que esto dificultaría su reciclaje.
  2. Compactar los desechos: Empieza a llenar la botella con residuos de plástico limpios y secos, como bolsas de plástico, envoltorios, envases de alimentos, y otros elementos plásticos que no puedan reciclarse de manera tradicional. Es fundamental asegurarse de que los desechos no contengan restos orgánicos, líquidos o materiales no plásticos.
  3. Compactar bien: Con ayuda de los palos o palillos, presiona los desechos dentro de la botella para compactarlos lo máximo posible. De esta manera, se logra que entren más residuos y se obtenga un ecoladrillo más resistente.
  4. Llenar la botella: Continúa agregando residuos y compactándolos hasta que la botella esté completamente llena y no sea posible introducir más plástico sin forzar.
  5. Cerrar la botella: Una vez que la botella está llena, coloca la tapa firmemente para que los desechos queden bien encapsulados.
  6. Pesaje y etiquetado (opcional): Si lo deseas, puedes pesarlo antes de utilizarlo para llevar un registro de la cantidad de plástico reutilizado. También es útil etiquetar el ecoladrillo con información sobre los desechos contenidos y la fecha.
  7. Utilización y almacenamiento: Pueden ser utilizados como elementos de construcción en diversos proyectos, como la creación de mobiliario, muros, jardinería, entre otros. Se pueden apilar y unir con materiales como mortero para formar estructuras más grandes y resistentes.

Es importante recordar que no son una solución definitiva para el problema de la contaminación por plásticos. Lo más adecuado es reducir, reutilizar y reciclar en primer lugar, y utilizar los ecoladrillos como una medida adicional para gestionar responsablemente los residuos plásticos que no pueden reciclarse tradicionalmente.

Además, en algunos lugares, existen iniciativas locales que los reciben para su uso en proyectos comunitarios. Siempre es recomendable investigar si hay organizaciones cercanas que recojan ecoladrillos para darles un uso adecuado.

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