David Acosta | R360
La secretaria de Salud, Alejandra Aguirre Crespo, se ha visto rebasada por la emergencia sanitaria por Covid-19, la falta de experiencia es evidente. No se puede esperar más de una funcionaria cuyo único logro para ocupar el cargo fue estar en la campaña de Carlos Joaquín.
Si alguien ha estado más ausente durante esta emergencia es la titular de la Secretaría de Salud (Sesa), quien ha preferido ocultarse que dar la cara y se ha conformado con emitir una “tablita” con datos estadísticos todos los días.
También te puede interesar: Los que no se quedan en casa
Hay muchas dudas alrededor de la emergencia sanitaria que no se han despejado y que los medios informativos han tenido que indagar por otras vías. Ha dejado expuesto al gobernador como vocero de la institución.
Quintana Roo es uno de los estados menos informados en cuanto al tema de Covid-19, los canales de comunicación oficial del Gobierno del Estado han resultado poco eficientes en la difusión de información, la gente se informa a través de las redes sociales, que a veces no es información confiable.
Pero el problema no es solo en materia de comunicación, sino también de atención a la pandemia. La contingencia sanitaria evidenció las carencias del sistema estatal de salud y del cuestionado trabajo que durante estos más de tres años ha realizado Aguirre Crespo. Además de una desordenada estrategia de atención del Covid-19.
El colapso de los servicios de salud no fue consecuencia de la emergencia sanitaria, sino de la falta de capacidad de la propia titular para mejorar la infraestructura, insumos, equipo, medicamento, capacitación y personal, a pesar de que ha tenido en sus manos un presupuesto superior a los nueve mil millones de pesos de 2017 al 2019. Y más de tres mil millones de pesos más autorizados para 2020.
Alejandra Aguirre solo trae como preparación académica una Licenciatura en Medicina, de la Universidad LaSalle de la Ciudad de México y una Maestría en Salud Pública con especialidad en Salud Pública por el Instituto Nacional de Salud Pública.
Entre sus cargos, antes de ocupar la titularidad de la Secretaría de Salud, solo figura docente de la Escuela de Medicina de la Universidad de Quintana Roo (Uqroo), médica del Hospital Materno Infantil Morelos y jefa del Departamento de Salud Reproductiva de la Sesa.
Su máximo logro es participar en la campaña de Carlos Joaquín. Desde antes de ser oficializada en el cargo fue criticada por el propio súper asesor, Juan de la Luz Enríquez Kanfachi, quien consideró que para el puesto se necesitaba a una persona con una preparación integral, pero el gobernador hizo oídos sordos.
La permanencia y la falta de experiencia de Aguirre Crespo para estar al frente de la Sesa hoy más que nunca ha costado a los quintanarroenses. Ha sido una funcionaria gris que incluso abandonó a sus propios compañeros: los médicos y personal de enfermería, quienes tuvieron que armarse de valor para atender los casos de Covid-19, sin la protección adecuada. La presión de los medios no solo logró mover a la funcionaria, sino al propio Carlos Joaquín, para resolver en parte el problema.
El ocultamiento y “maquillaje” de muertes y casos positivos de Covid-19 es otro tema que la titular de la Sesa no supo manejar, hoy le brincan por todos lados en Othón P. Blanco, Benito Juárez, Felipe Carrillo Puerto, Cozumel y Solidaridad. Pero sigue sin dar la cara y dar una explicación.
En el colmo de las cosas se atreve a hacer videos tratando justificar las muertes de Covid-19 con la obesidad y la hipertensión. Lo único que ganó es una lluvia de comentarios en su contra del por qué no se ha hecho nada al respecto de esos temas como institución. Eso sí, se presumió como docente.
Ella misma lo dice en su video, 8 de cada 10 muertes en Quintana Roo están relacionadas con hipertensión y obesidad. Vale la pena repetir el cuestionamiento: ¿Entonces qué ha hecho en estos tres años?
El tiro de gracia no solo para el gobierno sino para el futuro político de Carlos Joaquín se lo está dando Aguirre Crespo, sin embargo como dice el refrán popular: la culpa no la tiene el indio, sino el que lo hace compadre.
PAYO OBISPO
El que también ha dado palo de ciego en esta pandemia es el presidente municipal de Othón P. Blanco, Otoniel Segovia Martínez, quien no ha mostrado interés en hacer algo por los capitalinos, a excepción de un perifoneo en carros por la ciudad que pasa tan rápido que las personas ni siquiera tienen tiempo de escuchar lo que dice, de ahí en fuera se ha dedicado a realizar videos mal editados y con poca imaginación que a nadie interesan.