David Acosta | R360
CHETUMAL, QRoo.- Este 30 de abril no fue un día como cualquier otro en Chetumal, la mayoría de niños se mantuvieron en sus casas, no hubo eventos oficiales, muchos no recibieron regalos, ni siquiera felicitaciones. La pandemia por Covid-19 no permitió celebrar al futuro de Quintana Roo como en otros años.
La situación que prevalece el estado por la emergencia sanitaria hizo que hasta los padres se olvidaran de este día; el estrés, la preocupación económica y por la alimentación diaria los mantuvo ocupados. Aunque familias contaban con algún ahorro para comprar algún obsequio para sus hijos, prefirieron no arriesgarse a salir ante el temor de contagio en este Día del Niño.
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También hubo quienes llevaron a sus hijos al trabajo o de compras, para desahogar la presión de varias semanas de encierro. La tentación no estuvo presente, pues las jugueterías lucieron cerradas, al menos las que están fuera de los supermercados, al ser consideradas como actividades no esenciales.
Sin embargo, no faltaron padres de familia que aprovecharon la salida para abastecerse de alimentos y se llevaron consigo un regalo, una pelota o un juguete económico, para no dejar pasar el día.
El área de jugueterías en los supermercados lució con baja afluencia, y en las tiendas departamentales que ofrecen a crédito, incluso con ofertas, las compras no abundaron, pues la gente acudía principalmente a realizar los pagos de sus deudas.
De hecho, estas áreas no fueron surtidas como en otros años, en donde se colocaban hasta zonas exclusivas en el Día del Niño. Vendieron el inventario existente al tener en cuenta la crisis económica que ha generado la contingencia sanitaria.
Martha Canul, de la colonia Territorio Federal, dijo que lamentablemente no tuvo, en esta ocasión, para darle un obsequio a sus hijos.
“Todos los años les había dado por lo menos un juguete, pero hoy simplemente no hubo, no tenemos ni para comer, la situación es difícil por el coronavirus; lo más importante siguen siendo ellos, ya habrá oportunidad de celebrarlos”, aseguró.
Por su parte, Silvana Castro destacó que “este es un día muy importante para nuestra niñez, desafortunadamente no hay dinero para darles algún juguete, pero eso no impide que ellos estén contentos en su día; hoy vine al mercado porque mi hijo de ocho años quiere comer espagueti, se lo voy a hacer con mucho amor, es inteligente y comprende lo que estamos pasando”.
“Con tanta preocupación se me olvidó que hoy es el Día del Niño, no tengo dinero para llevarle algo a mis dos hijos, nunca me había ocurrido algo así. Sin embargo confío en que la situación mejorará, lo dejaremos para sus cumpleaños”, comentó Santiago Carrillo.
Los que ni se enteraron de lo que ocurre y que no vieron variación alguna fueron los siete niños que viven en el Área Femenil del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal, con edades entre los cero y siete años; cuyas madres, a través de un acuerdo con la Dirección General del Cereso, lograron tenerlos con ellas.
En 2019 y de acuerdo con información del Consejo Nacional de Población (Conapo); en Quintana Roo habían un promedio de 246 mil 301 niños, y 234 mil 270 niñas, de entre cero y 14 años.
