CHETUMAL, QR.- “Perdón por hacer esto, no queríamos generar molestias a la gente, pero está en juego nuestro patrimonio”, estas fueron las palabras de habitantes de la colonia Nuevo Progreso, quienes bloquearon dos tramos de la carretera federal tras el riesgo de perder sus viviendas a través de una subasta del Sistema de Administración Tributaria (SAT). La venta fue suspendida temporalmente, y prevalece la falta de certeza jurídica de sus hogares.
Desde un día antes y por lo complicado de la situación, los afectados informaron que tomarían acciones para ejercer presión. Fue el jueves en las primeras horas del día que avisaron sobre el cierre carretero casi en el entronque a la vía que va hacia la comunidad de Subteniente López, justo frente a la estación de servicio de combustible.
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Minutos antes de las 09:00 horas del jueves personas de la tercera edad, hombres, mujeres, jóvenes y niños, arribaron en vehículos, motocicletas, triciclos y hasta bicicletas para cumplir con su objetivo.
Sin planearlo de inmediato colocaron ramas, troncos y conos reflejantes en ambos lados de la carretera federal, además de plantarse con pancartas y lonas en las que explicaban las razones de su movimiento, en especial, la acción presuntamente fraudulenta de la Inmobiliaria Tamalcab que originó el problema con sus viviendas, desde hace casi dos décadas.
Ante el cierre de vialidades, la consecuencia fue inmediata: Hileras de vehículos en ambos lados de la cinta asfáltica. Las filas alcanzaban más de kilómetro y medio de ambos lados, pues era la hora pico para los trabajadores que ingresan y salen de la ciudad.
La molestia no se hizo esperar por parte de los automovilistas, que gritaban de todo, sus rostros en muchos casos reflejaban la impotencia ante la gente que no daba ningún paso atrás para abrir paso a la circulación vehicular. Había camiones de carga varados, vehículos particulares y de servicio público.
Patrullas de la Policía Federal, Ministerial, Estatal y Municipal se vieron en la necesidad de brincar los camellones para poder llegar a la zona del bloqueo e intentar convencer a las decenas de manifestantes.
El que tomó la batuta por el tramo carretero, fue un comandante de la Policía Federal quien pidió en reiteradas ocasiones que desbloquearan las vialidades, sin embargo los afectados no se cansaban en señalar las razones de su acción. En ese momento ya contaban hasta con un megáfono con el que dirigían a la gente que conformaba el contingente de manifestantes, sombrillas con el logotipo del Partido Acción Nacional eran utilizadas para cubrirse del intenso sol.
Más de una decena de reporteros llegaron al sitio y comenzaron a tomar impresiones de los manifestantes, que molestos contaban sus historias como el caso de Verónica Pérez Martínez, quien dijo que su familia es de seis integrantes y su casa es su único patrimonio.
Testimonios de quienes necesitan viviendas
Por su parte, Rosalía Belmares de Pérez, habitante en la colonia Nuevo Progreso desde sus inicios, solo tiene de familia a su esposo y su perrito. “No me importa pagar, pero que haya certeza jurídica”, aseguró.
María Guadalupe Suárez Cetina, de 69 años, comentó: “Quisiera creer en el gobierno, en las promesas, pero con tanta experiencia y más que vivo sola, es difícil creer en las autoridades”. Destacó que vive sola y sufrió un accidente por lo que no puede trabajar, no tiene para pagar su vivienda pues le pidieron 400 mil pesos y 50 mil para poder firmar su contrato.
Tras una larga insistencia la Policía Federal logró que se reabriera el paso vehicular por una hora, plazo que dieron los inconformes para que alguna autoridad estatal se apersonara al sitio y otorgara garantías sobre sus viviendas.
Comenzó el retiro de ramas y piedras sobre la carretera y los manifestantes permitieron el paso, al tiempo que llegó al sitio un director de la Secretaría de Gobierno, Enrique Miguel Paniagua, quien intentó mediar con la gente sin embargo no logró su cometido. Este funcionario fue destituido de la Secretaría de Educación como director jurídico en febrero pasado, por no acatar la sentencia de un juez federal, en el caso de los 29 maestros despedidos como consecuencia de la Reforma Educativa.
Cuando el funcionario de la Segob fue rebasado por los protestantes llegó partiendo plaza el Súper Delegado Arturo Abreu Marín, quien informó a los inconformes que le notificaron de la suspensión de la subasta de las 140 viviendas que iniciaría hoy viernes 27 de septiembre, ante el SAT, tras una gestión que se hizo a la misma instancia como parte del gobierno federal.
Sin embargo dejó en claro que aún los afectados tendrán que interponer recursos legales o seguir el proceso jurídico que corresponda para evitar la pérdida de sus viviendas.
Luego del anuncio los inconformes recobraron cierta tranquilidad, aunque no quedaron satisfechos porque no hubo nada por escrito y además la mayoría de las familias son de escasos recursos y no cuentan con el dinero suficiente para contratar abogados, por lo que buscarán en el Gobierno del Estado el apoyo para el proceso jurídico, aunque el Congreso del Estado ya los apoya con asesoría jurídica.
Por la falta de certeza jurídica en su patrimonio dijeron que en caso de una nueva “chicanada” realizarían de nueva cuenta otras acciones, pues non están dispuestos a perder el hogar de sus familias.
La manifestación y cierre carretero duró aproximadamente una hora y media; Abreu Marín se retiró en un automóvil y el emisario del gobierno estatal en su Minicooper azul. Los manifestantes se quedaron por unos minutos a un costado de la carretera para acordar su próximo paso.
