CANCÚN, QR.- El conducir con aliento alcohólico dejará de ser una falta administrativa para convertirse en un delito, al reformarse el artículo 186 del Código Penal de Quintana Roo.
José Julio Villarreal Zapata, el presidente de la Canirac Quintana Roo, indicó que están de acuerdo en la intención de querer prevenir accidentes, lesiones y daños, relacionados con el consumo de alcohol estando al volante.
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Agregó que los diputados que aprobaron la medida no están explicando con claridad las formas, por lo que hay muchas preguntas, como son:
¿Quién juzgará a las personas con aliento alcohólico al momento de ser detenidas?
¿Cómo se determinará si han cometido un delito?
¿Qué pruebas se utilizarán para sustentar las cargas?
¿Cómo se interpondrán las sanciones?
¿Qué va determinar si son 6 meses o 2 años?
Dudas sobre procesos a personas con aliento alcohólico
Recalcó que es un exceso la sanción y la posibilidad de privar a alguien de su libertad por un delito que no cometió son aspectos que generaron preocupación y podrían desencadenar una ola de amparos y quejas en contra de estas medidas, por lo que piden que frenen la iniciativa para los castigos para personas que conduzcan con aliento alcohólico.
Añadió que, si bien se deben tomar medidas para evitar accidentes por personas que manejen con aliento alcohólico, y garantizar la seguridad, es importante encontrar un equilibrio que no atente contra los derechos y libertades de los ciudadanos.
Julio Villarreal pidió a los diputados a no comparar a Cancún con destinos turísticos como Las Vegas, ya que las circunstancias son completamente diferentes, tan sólo con sus fuerzas policiales, en donde es más grave intentar sobornar a un policía que traer aliento alcohólico, además que tienen cámaras en sus uniformes y unidades, por lo que no existe comparación.
La implementación de estas sanciones podría sobrecargar aún más el trabajo de la Fiscalía, que ya enfrenta rezagos importantes y que podrían generar retrasos en los procesos judiciales y limitar su capacidad para abordar casos de mayor gravedad, como homicidios y lesiones.
Es importante destacar que no se deben comparar las circunstancias entre Cancún y ciudades de Estados Unidos. Las fuerzas policiales y las medidas de seguridad en ambos lugares son diferentes; es necesario abordar las problemáticas y situaciones específicas de la localidad, sin hacer comparaciones desafortunadas