David Acosta | R360
CHETUMAL, QRoo.- Empresarios del sur tuvieron poco interés en los créditos impulsados por el gobierno del estado, para mitigar los efectos económicos de la emergencia sanitaria por Covid-19, por el método, tasas de interés incómodas, garantía y buró de crédito. El mayor interés de los empresarios fue sobre los empréstitos ofrecidos por el Gobierno Federal, reveló el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Eloy Stalin Quintal Jiménez, quien solicitó y recibió sus 25 mil pesos.
El líder empresarial comentó que el Gobierno del Estado nunca informó cuántos créditos están disponibles, además de que se trataron de créditos que ya se manejan a través de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sede), es decir no fueron creados ex profeso para la situación que vive la iniciativa privada en estos momentos con la pandemia.
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Desde el método (tramitología) para obtener el crédito hubo desinterés por parte del sector empresarial del sur del estado, aunado a ello, las tasas de interés no eran cómodas desde el punto de vista de la iniciativa privada. Además, se pedían garantías para acceder a los empréstitos y por si fuera poco, entre los requisitos se pedía no estar en buró de crédito.
En cuanto al buró de crédito señaló: “es algo que era difícil de cumplir, pues del 100 por ciento de los empresarios del sur, el 60 por ciento está en esa condición”. Adicional a ello, hay un tiempo de entrega de aproximadamente 15 días.
En contraparte, dijo, que los préstamos del Programa Crédito Solidario del Gobierno Federal, que por cierto adquirió, fueron de mayor interés para los empresarios, toda vez que todo el trámite fue en línea, plazos cómodos, la tasa de interés baja, los requisitos sencillos y la entrega en menos de una semana. El único “pero” fue que si bien los 25 mil pesos sirven, es una cantidad limitada que no amortigua plenamente el problema económico por el que atraviesan los microempresarios.
El gobierno del estado promovió 21 opciones de créditos a través de la Sede para los empresarios, el total de los empréstitos solo 6 son financiados por el Gobierno del Estado a través del Fondo de Financiamiento de Quintana Roo (Fofinqroo) manejado por la Sede, los demás por instituciones bancarias.
Los créditos van desde los 10 mil pesos hasta los 500 mil pesos, con tasas de interés del 10 al 14 por ciento y con plazos de pago a 24 meses como máximo. En algunos casos, para acceder a los créditos, se solicita reporte especial de buró de crédito, garantía en propiedad o aval, incluso garantía dos veces al crédito que se otorga.
En tanto el programa Créditos Solidarios del IMSS es de 25 mil pesos, con tasa de interés del 6 por ciento, plazo de pago de 3 años y los requisitos son: no haber despedido a ningún trabajador durante los tres primeros meses del año, cotizar ante el IMSS, tener entre 1 y 10 trabajadores, Clave Única de Registro de Población (CURP), cuenta CLABE, nombre de banco y correo electrónico.
Quintal Jiménez señaló que la mayoría los negocios en el sur del estado son familiares, sin embargo, la mayoría ha buscado la manera de mantenerse en esta crisis. En Othón P. Blanco hay unas 6 mil empresas y en Bacalar unas 2 mil, el 90 por ciento son microempresas.
De ese total, un 20 por ciento ha resultado seriamente afectado y ha propiciado el despido de unos 4 mil trabajadores.
Poco apoyo del gobierno estatal
Hasta ahora, el Gobierno del Estado solamente ha apoyado en el tema de estímulos fiscales, pero no así en el tema financiero para las empresas. De hecho, en una reunión sostenida con autoridades de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) se habló de la posibilidad de un crédito para los empresarios de entre 80 mil y 300 pesos, sin garantías, pero no hubo ninguna otra información al respecto.
Otra de las cosas que también ha generado afectación al sector empresarial es la deuda que tiene con proveedores, que hasta hace dos meses ascendió a 300 millones de pesos y que se ha ido pagando poco a poco.
Para el sector empresarial, ahora es de vital importancia que se definan los tiempos para la reactivación de las actividades, y en el caso de Quintana Roo, la iniciativa privada solicitará que se dé prioridad a las empresas locales en la licitación de obras, servicios y productos.
También se espera que se haga un plan de recuperación económica de acuerdo a la región, toda vez que las condiciones del sur, centro y norte del estado tienen diferentes necesidades en los temas de turismo, comercio y servicios.
Hasta el momento, solo en el caso de Othón P. Blanco y Bacalar, de acuerdo al CCE, las pérdidas son de alrededor de 500 millones mensuales, sin embargo durante la “cuarentena” podrían alcanzar los mil 200 millones de pesos.
