CHETUMAL, QR.- La Secretaría General Iberoamericana seleccionó a la maestra artesana quintanarroense, Rosalinda Cauich para representar a México en la primera edición del Premio Iberoamericano de Artesanías.
En una primera etapa, el organismo emitió la convocatoria y recibió 96 postulaciones, quedando como finalista la artesana quintanarroense quien fue seleccionada en la rama de la cestería, como parte de la promoción de las iberartesanías.
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El Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (FONART), como parte de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), emitió la convocatoria respectiva como parte de la promoción de las iberartesanías.
La gobernadora Mara Lezama Espinosa expresó su satisfacción y la felicitó, es un orgullo quintanarroense, quien confirma una vez más que las manos mágicas de mujeres y hombres dedicadas a la labor artesanal elaboran productos de alto valor artístico.
Los resultados del Premio Iberoamericano de Artesanías se darán a conocer el 12 de junio de 2024 en la página web y redes sociales de Iberartesanías.
El arte de Rosalinda Cauich
La maestra artesana quintanarroense Rosalinda Cauich, es originaria de Kopchén, una comunidad cercana a Felipe Carrillo Puerto municipio ubicado al sureste del estado de Quintana Roo.
Rosalinda recibió su primera canasta tejida a los siete años como regalo de cumpleaños, y comenzó a fabricarlas a la edad de diez; desde entonces, y a lo largo de los años, ha hecho del tejido su arte y una forma de vida.
Hoy en día se ha dedicado a perfeccionar sus técnicas y experimentar nuevos enfoques creativos.
Su pasión y entrega por preservar sus tradiciones y promover el patrimonio cultural de su pueblo la ha llevado a convertirse en una figura destacada de las artesanías en Quintana Roo.
Además de su habilidad como artesana quintanarroense, ha demostrado ser una digna representante de la preservación y difusión de las tradiciones de su comunidad.
A través de su trabajo, ha ayudado a revitalizar el interés en las artesanías tradicionales entre las generaciones más jóvenes y ha promovido el reconocimiento del valor cultural y económico de estas prácticas ancestrales.
Esta artesana quintanarroense continúa inspirando a otros a seguir demostrando que las artesanías son una fuente de orgullo nacional e internacional además de un sustento digno.