CHETUMAL, QR.- Un profesor y un practicante de Educación Física, de la primaria Santiago Pacheco Cruz, fueron denunciados por actos de discriminación en contra de una familia lesbomaternal.
Las afectadas, dos mujeres que son cabeza de la familia, cuya integrante fue discriminada primero por un maestro de Educación Física de la mencionada escuela y posteriormente por el maestro titular, quien ignoró la queja de las mismas, interpusieron una queja ante la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ) y una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE).
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En ambos casos, la queja y la denuncia fueron interpuestas por discriminación y lesbofobia en contra de los maestros de la citada escuela primaria, ante las dos autoridades.
Con relación a la denuncia ante la SEQ, las afectadas expusieron el caso ante Rubén Homero Peña Peralta, director de Seguimiento y Gestión para la Educación Básica.
Posterior a la denuncia, la autoridad educativa les informó que el caso lo atenderá el mismo director de la escuela, a quien describieron como “machista y que no tiene ni conocimientos, pues se conduce con amiguismo con los docentes que cometieron estos actos”.
El presunto acto de discriminación
Las afectadas recibieron la recomendación de que enseñen a ser empática a su hija “porque el maestro pudo tener un mal día y por eso dijo eso, ignorando el sentido de demanda”.
Según contaron las afectadas, su hija menor comentó que se encontraba en las gradas junto con sus compañeras de salón y estaba platicando con ellas cuando les comentó que tiene dos mamás.
Explicó que un docente al que la niña identifica como un “maestro de Educación Física, delgado,” estaba sentado en las gradas, cerca de ellas y al escuchar el comentario les dijo: “toda familia tiene una mamá y un papá”, por lo que al escucharlo otra compañera dijo que en su caso ella tenía una mamá y un papá y un padrastro, a lo que maestro repitió que las familias “solo tienen una sola mamá y un papá, no tienen dos mamás”.
Las quejosas afirmaron que esto causó molestia en la niña, por lo que se retiró de las gradas y se fue a su salón.
Agregaron que al escuchar esto que había sido comentado a una de las madres de la pequeña, ésta decidió ir a la escuela y encontró al maestro de Educación Física, a quien identificó como P. M. y a su practicante, confirmando la niña que este último había expresados dichos comentarios.
Al cuestionarle la situación de presunta discriminación y emisión de prejuicio al imponer que” solo hay un modo de familia”, negó la situación de la niña.
Ante esto se le expuso al maestro de Educación Física que es su responsabilidad que su practicante se conduzca en respeto a los derechos humanos y con conciencia de que existen familias diversas, a lo que respondió que él no era responsable de lo que hiciera su pasante, de los actos que su aprendiz hace y que no iba andar de tras de él.
Del mismo modo reiteró que él no tenía ninguna situación y que incluso ha hablado con “la otra (mamá)”. Una de las afectadas le dijo: “no es la otra, es mi esposa” y el profesor continuó: “bueno su pareja”, a lo que se le repitió que era su esposa. El docente volvió a señalar: “bueno no sé la relación que tienen ustedes”.
Incluso una de las inconformes le hizo el comentario de que si era necesario llevar su acta de matrimonio y de ser así, si se la pedía a las familias heterosexuales.
Las quejosas consideraron que los servidores públicos que están en un espacio educativo deben conducirse con respeto a los derechos humanos y evitar sus prejuicios y su “adultocentrismo”, al no respetar todos los tipos de familia que hay.
El sustento de las denuncias
Las denuncias presentadas ante las autoridades, tiene el siguiente sustento jurídico:
- La fracción IV del artículo tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece la igualdad educativa de todos ante la ley y con los mismos derechos, sin discriminación por nacionalidad, etnia, creencias o cualquier otro motivo.
- El artículo 12 de la Carta Magna estipula la sana convivencia en las escuelas, basada en tres dimensiones interrelacionadas: la inclusiva, la democrática y la pacífica.
- Convivencia inclusiva: reconoce el derecho a la dignidad de las personas por el simple hecho de serlo, no importando su religión, etnia o nacionalidad, condición social, edad, género, preferencia sexual, discapacidad, condiciones de salud. Dentro de la escuela, se debe respetar la diversidad de los actores educativos, eliminando las prácticas discriminatorias y de exclusión social.
- Los directores y docentes por normatividad están obligados a: abordar la convivencia escolar desde distintas perspectivas y disciplinas como la educación cívica y ética; educación ciudadana; educación inclusiva y democrática; resolución pacífica de conflictos; perspectiva de género; promoción y respeto de los Derechos Humanos.