CANCÚN, QR.- Además de que el 50 por ciento de los músicos cancunenses no ha recuperado su empleo tras la pandemia, los que laboran lo hacen con contratos de dos o tres días a la semana, eso sin contar que sufren con la falta de turismo en temporada baja.

No tienen seguro médico, ni prestaciones, ellos siguen adelante, pues como dicen: “llevan la música por dentro”.   

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En un destino turístico como Cancún, los artistas son parte esencial, son los que dan vida no solo a las fiestas, a los espectáculos en los hoteles, amenizando la comida en un restaurante, donde cada vez es más recurrente la música grabada, que los desplaza de esos empleos. 

Don Francisco Aguilar Mac, originario de Valladolid y fundador del Trío Los Mayas, llegó a Cancún en 1983; recordó que ofreció su primera serenata y fue ahí cuando decidió que tenía que seguir ese camino, entonando melodías para enamorar, para brindar alegría e incluso, aquellas que amenizan los momentos más tristes y que se dan en las despedidas de seres queridos. 

Dijo que llegó a Cancún para cumplir con un contrato de 90 días en el Hotel Sheraton; después tuvo más oportunidades para desarrollar su carrera en el destino y no desaprovechó la oportunidad.

Pocas oportunidades para los músicos

Lo anterior fue cuando las grandes empresas hoteleras contrataban a los músicos con todas las prestaciones de Ley, situación que se ha desvanecido, pues ahora la mayoría contrata por horas o días a la semana. 

“En aquellos tiempos los hoteles te contrataban para trabajar todos los días, tenías oportunidad de desarrollar antigüedad, los músicos éramos bien valorados. Ahora te contratan por dos o tres días a la semana, por honorarios y sin prestaciones, por lo que muchos músicos padecen desarrollar esta profesión que para mí es una de las más completas”, expresó.

A la par de su grupo musical,fundado en 1988, Aguilar Mac logró una carrera magisterial e impartió clases de música a nivel preescolar. La agrupación conformada por amigos y músicos entrañables, sin embargo, el legado continúa con su hijo Francisco.

“Para mí la música ha sido toda mi vida, es una profesión muy completa, te da muchas satisfacciones, aunque es un poco exigente y requiere mucha disciplina”, señaló.

Por su parte, Juan Bosco Domínguez, delegado del gremio de músicos afiliados a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) en Cancún, señaló que de los más  2 mil 700 artistas que laboraban en los centros de hospedaje, se encuentra activo poco más del 50 por ciento.

Dijo que pese a los buenos números en cuanto a ocupación hotelera, los espectáculos en vivo no se han restablecido a la misma velocidad que el turismo a Cancún.

Al inicio de la pandemia, los espectáculos musicales fueron los primeros que se recortaron ante la escasez de recursos por parte de los hoteleros.

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