CHETUMAL, QRoo.- Solo un máximo de siete diputados trabajan a la semana. Vienen de una parálisis de 63 días de inactividad, siguen acumulando iniciativas y ahora quieren poner “Asistentes Legislativos de Comisiones”, figura que pretende suplir a los legisladores cuando no puedan hacer el trabajo principal por el que los quintanarroenses les pagan su sueldo.
De inicio, los legisladores, fieles a su tradición, comenzaron tarde la sesión número 3 de la Comisión Permanente, planteada a las 13:00 horas, ayer, miércoles.
Llegaron solo seis de siete diputados: José Luis Guillén López, Ana Pamplona Ramírez, Eduardo Martínez Arcila, Carlos Hernández Blanco, Pedro Pérez Díaz y Reyna Durán Ovando; faltó José Luis “Chanito” Toledo Medina. Aunque no pertenece a la comisión, Judith Rodríguez Villanueva acudió a presentar su iniciativa.
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En el punto de la orden del día, 17 puntos esperaban ser desahogados en lo que parecía una maratónica sesión, aunque solo 11 registraban iniciativas de reforma. En esta ocasión se cuidó la presencia de personal de apoyo; eran menos que en ocasiones anteriores, así quedó registrado en las pantallas de la transmisión virtual.
Pasaron los primeros puntos protocolarios, es decir, la lectura del orden del día, el pase de lista, la instalación de la sesión, la lectura de la correspondencia y la aprobación del acta de la sesión anterior.
Todos estaban en sana distancia y la sesión transcurría sin mayor problema hasta que llegó el punto 10 del orden del día ingresado por la legisladora priista Judith Rodríguez Villanueva.
La introducción de la iniciativa la dio Martínez Arcila, en calidad de secretario de la Comisión Permanente, quien hoy lució una careta de protección con el nombre en inglés “Face Shield”. Seguidamente, Rodríguez Villanueva tomó la palabra para leer su propuesta que implica la reforma de la Ley Orgánica del Congreso del Estado y el Reglamento de la Sesión de Comisiones.
En un texto de poco más de cinco minutos plasmó su intención de crear la figura de “Asistente Legislativo de Comisiones”, dijo, para suplir a los diputados cuando éstos por sus “múltiples” ocupaciones no puedan llegar a estos trabajos legislativos.
La función principal del legislador es proponer, analizar y aprobar leyes, trabajo por el que los diputados devengan la suma de poco más de 65 mil pesos al mes, es decir entre los 25 se eroga mensualmente 1 millón 625 mil pesos.
Vestida de blusa café, así como portando gafas y cubrebocas de protección contra Covid-19, daba rienda suelta a la lectura, que hasta en los micrófonos se escuchaba cuando jalaba aire. Iba “armada” con laptop, teléfono celular y lápiz para preparar su intervención.
Eso sí, dijo que esta figura no implicaba “justificar” las inasistencias de los legisladores, puesto que los Asistentes Legislativos de Comisiones solo tenían voz para exponer las razones jurídicas y de argumentar las propuestas que se presenten y no podrá debatir, discutir o controvertir con algún posicionamiento, además que deberán ser acreditados previamente.
Posterior a la lectura de la propuesta de reforma fue enviada a las comisiones respectivas para su análisis.
Iniciativas rezagadas
Con las iniciativas que ingresaron ayer, ya son más de 85 iniciativas que están rezagadas durante la pandemia por Covid-19 y pese a ello hasta el momento no hay hasta el momento un planteamiento formal para convocar a un periodo extraordinario y poder desahogarlas. Tampoco se ha sabido nada de reuniones de comisiones para analizarlas.
La última intervención durante la sesión fue de Hernández Blanco, quien se tuvo que grabar con su celular, pues durante la transmisión siempre apareció en una “esquinita”.
Los legisladores concluyeron la sesión cerca de las 15 horas, pues duró aproximadamente 60 minutos y convocaron para una nueva reunión de trabajo hasta el próximo miércoles, a las 13 horas.
