SAN FRANCISCO, Cal.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado la reapertura de la emblemática prisión federal de Alcatraz, situada en una isla frente a San Francisco, California. La decisión, comunicada a través de su plataforma Truth Social, busca albergar a los delincuentes más violentos y peligrosos del país, incluyendo inmigrantes indocumentados con antecedentes penales.
Alcatraz, conocida como La Roca, funcionó como prisión federal de máxima seguridad entre 1934 y 1963. Durante ese tiempo, albergó a algunos de los criminales más notorios de la historia estadounidense, como Al Capone, Robert Franklin Stroud (el Hombre Pájaro de Alcatraz), Bumpy Johnson y Alvin Karpis, quien pasó más tiempo en la prisión federal de Alcatraz que cualquier otro recluso.
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La prisión fue cerrada en 1963 debido a sus altos costos operativos, siendo tres veces más cara que otras prisiones federales, y a problemas estructurales derivados de su ubicación en una isla expuesta a la salinidad y al viento. Desde entonces, ha sido administrada por el Servicio de Parques Nacionales como una atracción turística que recibe aproximadamente 1.5 millones de visitantes al año.
La decisión de Trump de reabrir la prisión federal de Alcatraz se enmarca en su política de ley y orden y en su postura de mano dura contra la delincuencia y la inmigración ilegal. En su anuncio, el presidente instruyó a la Oficina Federal de Prisiones, al Departamento de Justicia, al FBI y al Departamento de Seguridad Nacional para que trabajen en la reconstrucción y ampliación del histórico penal.
Trump ha sugerido que, además de los criminales violentos, inmigrantes indocumentados con antecedentes penales podrían ser encarcelados en la prisión federal de Alcatraz. Esta medida sigue a su reciente orden de enviar inmigrantes con historial criminal a la prisión de Guantánamo, así como al envío de más de 200 inmigrantes, en su mayoría venezolanos, al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador, una acción que ha generado demandas legales por ser considerada inconstitucional.
Critican reapertura de la prisión federal de Alcatraz
La reapertura de Alcatraz ha sido criticada por diversas figuras políticas. La expresidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, calificó la iniciativa como poco seria, señalando que Alcatraz es actualmente un parque nacional y una importante atracción turística.
La prisión federal de Alcatraz es conocida por su reputación de ser a prueba de escapes. Durante sus 29 años de funcionamiento, 36 presos participaron en 14 intentos de fuga; siete murieron y dos se ahogaron. Cinco reclusos siguen siendo considerados como “desaparecidos y presuntamente ahogados”.
La reapertura de la prisión federal de Alcatraz plantea desafíos logísticos, financieros y legales, incluyendo la modernización de las instalaciones y la negociación de la jurisdicción con el Servicio de Parques Nacionales. Además, la Oficina Federal de Prisiones ha estado bajo escrutinio por mala conducta sistémica, escasez de personal y mala gestión, lo que ha llevado a reformas recientes.
A pesar de las críticas y los desafíos, Trump ha defendido su decisión como parte de su agenda para Hacer a América Grande de Nuevo (MAGA, por sus siglas en inglés), argumentando que la reapertura de Alcatraz servirá como un símbolo de justicia y orden en el país.
La historia de Alcatraz y su reputación como una de las prisiones más infames del mundo la convierten en un símbolo poderoso en el debate sobre la justicia penal y la inmigración en Estados Unidos. La decisión de Trump de reabrirla podría tener implicaciones significativas en la política y la sociedad estadounidense en los próximos años.
