CDMX.- El fenómeno astronómico conocido como lluvias de estrellas Leónidas volvió a captar la atención internacional al desplegar uno de los espectáculos celestes más brillantes y veloces de la temporada. Este fenómeno, activo desde el 6 de noviembre y visible hasta el 20 del mismo mes, tuvo su punto máximo entre la noche del 16 y la madrugada del 17 de noviembre, el cual fue uno de los periodos más importantes, según la Organización Meteorológica Internacional.
Medios como New York Times y El Universal han dedicado amplia cobertura a estas lluvias de estrellas Leónidas, destacando su intensidad, su origen y las condiciones ideales para observarlas.
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Las lluvias de estrellas Leónidas se caracterizan por producir meteoros que alcanzan velocidades de hasta 70 kilómetros por segundo, generando estelas brillantes que pueden ser vistas tanto desde el hemisferio norte como desde el hemisferio sur.
Este año, la Luna llena apenas en un 9 por ciento favoreció una visibilidad óptima, permitiendo a observadores captar incluso los rastros más tenues. Expertos subrayan que estos meteoros provienen de los restos del cometa 55P/Tempel-Tuttle, descubierto en 1865, cuyos fragmentos arden en la atmósfera terrestre al entrar en contacto con ella.

El fenómeno ha sido especialmente apreciado en México debido a la combinación de condiciones atmosféricas favorables y cielos despejados durante las madrugadas. Aunque su punto máximo ocurrió el 17 de noviembre, plataformas de observación en vivo continúan transmitiendo imágenes en tiempo real desde regiones donde aún se proyecta actividad destacada de estas lluvias de estrellas Leónidas.
Además, herramientas como medidores de actividad meteorítica de la Red Mundial de Meteoros permiten anticipar cuándo podrían registrarse nuevos picos luminosos.
¿Cómo observar lluvias de estrellas Leónidas?
La observación de las lluvias de estrellas Leónidas depende de factores clave como ausencia de nubes, poca contaminación lumínica y suficiente adaptación ocular a la oscuridad.
Especialistas del Planetario Adler, recomiendan evitar telescopios y utilizar solamente la vista al natural para abarcar el mayor campo posible. Advierten que en la mayoría de las ciudades la luz artificial limita la cantidad de meteoros visibles por hora, aunque en condiciones óptimas es posible observar decenas de estelas.
El mes de noviembre trae además otros eventos astronómicos relevantes como:
- La luna nueva conocida como “micromoon” el 20 de noviembre
- La oposición de Urano el día 21
- La alineación óptima del cúmulo estelar de las Híades el 27.
La combinación de estos eventos coloca a noviembre como uno de los periodos más atractivos para la observación astronómica.

