El Papa Francisco, nacido como Jorge Mario Bergoglio, falleció la madrugada del 21 de abril de 2025 a los 88 años en la Casa Santa Marta del Vaticano, tras una larga batalla contra una neumonía bilateral que lo mantuvo hospitalizado durante 37 días en Roma.
Su deceso fue confirmado oficialmente por el cardenal Kevin Farrell, quien asumió temporalmente la administración del Vaticano hasta la elección de un nuevo pontífice.
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El Papa Francisco será recordado como el primer Papa latinoamericano y jesuita, elegido el 13 de marzo de 2013 tras la renuncia de Benedicto XVI. Su pontificado se caracterizó por un enfoque pastoral centrado en los pobres y marginados, así como por una serie de reformas que generaron tanto admiración como polémica dentro de la Iglesia.

Entre sus contribuciones más destacadas se encuentra la publicación de la encíclica Laudato si’ en 2015, un llamado urgente a cuidar el medio ambiente y enfrentar el cambio climático. Además, en 2016 declaró el Jubileo Extraordinario de la Misericordia, enfatizando la importancia del perdón y la reconciliación en un mundo cada vez más dividido.
Franciso, el Papa de la pandemia

Durante la pandemia de Covid-19, su histórica bendición Urbi et Orbi en una Plaza de San Pedro vacía se convirtió en un poderoso símbolo de fe y esperanza en tiempos de incertidumbre. Este gesto, transmitido a millones de hogares en todo el mundo, consolidó su imagen como un pastor cercano, preocupado por los miedos y sufrimientos de la humanidad.
El legado del Papa Francisco perdura como un testimonio de humildad, compasión y compromiso con la justicia social. Su pontificado dejó una Iglesia más abierta al diálogo y más consciente de los retos globales del siglo XXI. Su memoria vivirá en los corazones de quienes encontraron en él una guía y un ejemplo a seguir.
Con el inicio del periodo de sede vacante, el mundo católico espera con esperanza y reflexión el nombre del próximo Sucesor de Pedro, quien deberá continuar la tarea de guiar a la Iglesia en tiempos desafiantes. La influencia y los logros de Francisco seguirán siendo referencia ineludible para quienes buscan un liderazgo inspirado en la fe y el servicio.

