CANCÚN, QR.- Un sistema anticiclónico es una región de alta presión atmosférica que impacta directamente en las condiciones climáticas de las zonas bajo su influencia, y en especial, en la dinámica de los ciclones tropicales.
Este tipo de sistema, caracterizado por el descenso del aire y su dispersión en diversas direcciones, provoca un aumento de presión en la superficie, inhibiendo la formación de nubes y precipitaciones.
También te puede interesar: Arriba el crucero M/S Resilient Lady a Mahahual
La presencia de un sistema anticiclónico se asocia comúnmente con cielos despejados y temperaturas estables, generando condiciones opuestas a las de los ciclones, que requieren áreas de baja presión y alta humedad para desarrollarse y fortalecerse.
La interacción entre anticiclones y ciclones es un fenómeno climático de gran relevancia. Los anticiclones, debido a su alta presión, tienden a actuar como una barrera que afecta directamente la trayectoria de los ciclones.
Esta fuerza puede empujar o desviar a los ciclones hacia otras regiones, alterando su rumbo original y, en algunos casos, evitando que toquen tierra en áreas específicas bajo influencia anticiclónica.
Sistema anticiclónico
Los sistemas anticiclónicos limitan el desarrollo y la intensificación de estos fenómenos. El aire seco y la estabilidad atmosférica que produce un anticiclón dificultan que un ciclón acceda a las condiciones necesarias para ganar fuerza.
Al privar a los ciclones de humedad y calor, los anticiclones reducen significativamente su capacidad para fortalecerse y, en muchos casos, pueden contribuir a su debilitamiento progresivo.
En este contexto, la presencia de un sistema anticiclónico puede servir como un amortiguador natural contra el impacto de ciclones en ciertas regiones.
