La organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) presentó su Decálogo de condiciones para transformar la educación bajo el impulso de los equipos docentes.
El pasado 16 de octubre, Día Nacional de los Profesores en Chile, la Oficina Regional de la Unesco para América Latina y el Caribe y la Fundación Santa María (SM) dieron a conocer un documento que ofrece una ruta para transformar la docencia y lograr mayor calidad educativa.
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El profesor, visto como el factor intraescolar que más influye en el aprendizaje de los estudiantes y cuyo papel en el ejercicio del derecho a la educación es esencial, es el protagonista de este decálogo.
Unesco impulsa colaboración docente para transformación educativa

- La Unesco establece cuidar el bienestar integral de los docentes. Promover el bienestar del profesorado en cuanto a sus necesidades emocionales y psicosociales, sus relaciones con alumnos, escuela y familia, garantizando su seguridad y evitando que sean sujetos de intimidación o violencia y estableciendo espacios y redes de soporte entre docentes.
- Mejorar las condiciones de trabajo del profesorado. Reducir la burocracia, el número de alumnos por profesor y el número de horas lectivas de los docentes. Fomentar la participación en la formulación de sus condiciones laborales, asegurando condiciones de empleo decente y seguro. Dotarlos con recursos pedagógicos, tutoriales, tecnológicos y formativos necesarios para impartir una educación de calidad, integral, transformadora, inclusiva, efectiva y pertinente.
- Reforzar la atención tutorial y el acompañamiento psicopedagógico, trabajando en colaboración con la comunidad educativa: Proporcionar los apoyos necesarios (de personal, económicos, de capacitación) para la labor docente, orientados a reducir los abandonos, superar las situaciones disruptivas y asegurar la colaboración de las familias.
- La Unesco busca crear una cultura colaborativa en las comunidades educativas y en los equipos docentes, caracterizada por el apoyo y el desarrollo mutuo: Pasar de una cultura de trabajo individual a una cultura de equipo y de colaboración donde se impulse la codocencia, coevaluación, la observación entre pares y las mentorías como vías de desarrollo profesional.
- Apoyar la autonomía y la libertad académica de los equipos docentes, dentro de un marco de corresponsabilidad y de una cultura orientada al desarrollo profesional y a la mejora del aprendizaje: Fomentar la estabilidad de los equipos docentes para facilitar la consolidación de comunidades profesionales y la continuidad de los procesos de enseñanza, impulsando proyectos de innovación pedagógica, promoviendo una práctica reflexiva sobre las experiencias de aula y estableciendo mecanismos de evaluación y retroalimentación constructiva que promuevan la corresponsabilidad del equipo y la mejora continua.
- La Unesco propone favorecer un clima adecuado para el desarrollo de los procesos de enseñanza-aprendizaje, en entornos educativos inclusivos, equitativos, seguros y saludables, donde se cuide el bienestar docente y del alumnado.
- Crear un modelo de desarrollo profesional que atraiga, forme y retenga a los mejores docentes. Ofrecer procesos de mentoría e inducción adecuados a las necesidades de los profesores noveles y preparar a todos docentes para una enseñanza relevante y de calidad, que aborde la educación para el desarrollo sostenible, para la ciudadanía mundial, los derechos humanos y una cultura de paz.
- Cuidar que los salarios sean acordes con la responsabilidad que exige la labor educativa: Asegurar que los docentes cuenten con salarios competitivos respecto de profesionales con similares cualificaciones. Garantizar una financiación pública y nacional consistente con los criterios actuales de un 6% del PIB y un 20% del gasto público total, y mejorar el gasto destinado al profesorado, más allá de los salarios.
- Establecer políticas de equidad de género y de diversidad cultural: Promover la diversidad y equidad en los lugares de trabajo, garantizando los derechos y la protección de la diversidad cultural en el currículo y la composición del profesorado, especialmente a la población indígena, afrodescendiente, con discapacidad y migrante.
- Propiciar una mayor implicación de los equipos docentes en la estrategia educativa, tanto en las decisiones de centro como en el diseño de políticas educativas de mayor alcance, mediante el diálogo social. Implicar a los equipos docentes en la creación de un nuevo contrato social para la educación.

