Martín G. Iglesias | R360
Lo que menos necesita la sociedad quintanarroense en este tiempo, es que los diferentes sectores productivos y los políticos empiecen a generar una polarización en cuanto a la situación que se vive por la pandemia, la economía, la salud, la educación y las elecciones.
Hoy, Quintana Roo tiene graves problemas y crisis que atravesamos por falta de liderazgo en el Gobierno del Estado, no es tiempo de hacer llamados a una alianza meramente electoral que beneficie a una desdibujada oposición; es tiempo de sumar esfuerzos con la sociedad para enfrentar, no solo la pandemia, sino la recuperación económica.
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La ciudadanía lo que requiere es la consolidación de colectivos y organizaciones en las que se vean representados los intereses comunes con miras a la solución de sus demandas.
No aparece por ningún lado la estrategia de la Secretaría de Desarrollo Económico para incentivar la reactivación; no vemos una estrategia de salud específica, pues después del fracaso de “Médico en tu casa”, ahora se les ocurre la puntada de “médico en tu chamba”; qué decir del enfrentamiento que se tiene del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) sección 25, con los Servicios Educativos de Quintana Roo (SEQ), en el que piden hasta la destitución de la titular, Ana Isabel Vásquez Jiménez.
Mención aparte merece el actuar político de los que ya piensan en las próximas elecciones y dejan de un lado su responsabilidad Constitucional de servir al pueblo.
La oposición está borrada del mapa político. Más que alianzas, distintos frentes y colectivos de asociaciones, deben levantar la voz para lograr acuerdos que conlleven a un nuevo pacto social. Es lamentable que ni la propia XVI Legislatura se ponga de acuerdo para elegir a quien estará al frente del Instituto de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales de Quintana Roo (Idaipqroo). Considero que puede lograrse por una vía alterna que incluya a los más amplios sectores de la sociedad con una fórmula muy sencilla: erradicar los errores, reforzar los aciertos y organizarnos, no para confrontarnos, sino para alcanzar los objetivos de la colectividad.
Queda demostrado que uno de los principales obstáculos a los que nos enfrentamos todos los quintanarroenses es la polarización política que crece y se desborda a diario en el acontecer político; polarización de la que también han sido parte los sectores productivos o al menos una parte. Podría entenderse de aquellos que perdieron el poder o los privilegios de los que gozaban, sean los que provoquen los enfrentamientos de los quintanarroenses, pero me es difícil entenderlo de los llamados o reconocidos cómo líderes sociales o “influencers”.
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El llamado a “jalar parejo” no es solo para beneficiar a unos cuantos, sino para que los objetivos de la colectividad se cumplan: la disminución de contagios por Covid-19, la reactivación económica, la educación y esperar los tiempos electorales.
Sascab
En Benito Juárez, donde está Cancún, se crea una novedosa policía: La Policía de Reacción COVID-19. Al menos ya recibieron la capacitación del protocolo para coadyuvar con los gobiernos federal y estatal en la implementación de medidas sanitarias de inmediata ejecución para prevenir los contagios por el virus Sars-Cov-2, que produce la enfermedad de Covid-19.
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La Presidente Municipal, Mara Lezama Espinosa, destacó que la importante labor de esta corporación es crear conciencia sobre la prevención en la comunidad, ya que todavía no hay vacuna ni tratamiento específico. Será un grupo de 30 policías que formarán parte de la PRC (Policía de Reacción COVID-19), para vigilar la correcta aplicación de las medidas sanitarias.
