Martín G. Iglesias | R360
Conforme se acerca el tiempo del inicio del proceso electoral 2021, la clase política arrecia su presencia en los diferentes foros, sus “acciones” las distribuyen en sus redes sociales y hasta pagan publicidad para que dichas redes sociales puedan tener mayor alcance.
A la mayoría de esta clase política quintanarroense no le interesa lo que suceda con los contagios del Covid-19, le importa poco las muertes de las personas por este virus y ni siquiera se acerca a las familias para darles el pésame, dicen, eso que lo hagan las autoridades sanitarias.
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Pero lo que genera más estrés y hasta molestia por parte de la sociedad es el enfrentamiento político que prevalece, no solo entre partidos políticos, sino también al interior de los propios institutos, no se diga la campaña negra permanente que tiene el Movimiento Ciudadano (MC) contra el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a quienes no baja de corruptos; lógicamente, entre las patas se lleva al Partido Verde Ecologista de México (PVEM) que es aliado de Morena.
De por sí la mayoría de la población vive con el estrés por causas del Covid-19, ahora el estrés que se vive en torno a temas políticos es profundamente preocupante, porque es difícil para los quintanarroenses alejarse de ella. En todos los medios tradicionales y digitales estamos rodeados de conversaciones, noticias y medios sociales que constantemente nos recuerdan los temas que más nos estresan: el Covid y la política.
Basta ya de los enfrentamientos por temas políticos, es necesario que la sociedad tome las riendas de los temas y pida a los actores en política que se sienten en una mesa de diálogo para llegar acuerdo, privilegiando el bien social, no como ahora que se privilegia el interés partidista.
Basta ya del enfrentamiento de senadores contra diputados, de diputados contra presidentes municipales, del gobierno del estado contra algunas alcaldesas, de los partidos políticos contra sus adversarios. No es con la descalificación que se ganarán la simpatía de la población, sino con propuestas e ideas reales que ayuden a la población a salir de la crisis de salud y principalmente de la económica, que afecta a las familias quintanarroenses.
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No se han dado cuenta los políticos que estos síntomas de estrés pueden parecer menores, pero pueden llevar a efectos negativos sobre la vida cotidiana y la salud física general cuando continúan durante un largo período.
Sascab
El secuestro del pequeño Dylan, en un mercado de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, hizo que las autoridades dieran con 23 menores privados de su libertad. Tres mujeres los obligaban a vender artesanías en la zona turística más importante del estado.
Para nadie es un secreto (pero no hay voluntad de solucionarlo), que la trata de menores es uno de los grandes pendientes que hay en México. Las víctimas son cada vez más jóvenes, incluso bebés son contrabandeados, en esta ocasión hallaron tres lactantes, y los delincuentes no sólo los obligan a trabajar o a la prostitución, también los manipulan para delinquir.
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Las cifras sobre trata de menores son alarmantes. Basta decir que es el tercer negocio ilícito más redituable del mundo. En México, el 99 por ciento de las víctimas son mujeres y niñas. Se sabe que el territorio mexicano es fuente, tránsito y destino para la trata de personas, con fines de explotación sexual y trabajo forzado, ahora también se habla de extracción de órganos. En esto es que deberían de trabajar los políticos con más efectividad.
