CHETUMAL, QR.- El Consejo Ciudadano de Chetumal anunció la celebración del 123 aniversario del Territorio Federal de Quintana Roo, con un tradicional “Huateque Chetumaleño”, evento que tendrá lugar el próximo sábado 22 de noviembre a partir de las 17:30 horas en la plazoleta de la Maqueta de Payo Obispo.
Una vez más la sociedad civil pone el ejemplo, esta vez recordando la fecha fundacional de una nueva identidad: quintanarroense, el 24 de noviembre de 1902, cuando el presidente Porfirio Díaz decidió crear a través del Congreso de la Unión el Territorio Federal para consolidar la integridad geográfica en esta alejada frontera sur y dar nacimiento a un nuevo gentilicio que se sumó desde entonces al mosaico cultural de México.
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Identidad y cultura en el 123 aniversario del territorio
La celebración del 123 aniversario del territorio contará con la participación del Consejo Ciudadano que preside Georgina Marzuca Fuentes, quienes retomarán una de las tradiciones en peligro de extinción, el “Huateque Chetumaleño” fiesta popular que amenizaba los años de esfuerzo y trabajo de aquel pueblo libre, que bajo el sol y la tenacidad como virtud, sentó las bases económicas, sociales y culturales del nuevo territorio federal.
La celebración del 123 aniversario del territorio comenzará con honores a la bandera, entonación del Himno a Quintana Roo y la explicación de la Maqueta de Payo Obispo. Luego se hará el pase de lista de las familias fundadoras y se contará una remembranza de Chetumal a cargo de Carlos Cardín Pérez.

Seguidamente, el ciudadano Mario Aguilar Vargas dará lectura a la Declaratoria de identidad y pertenencia quintanarroense y se rendirá un reconocimiento al Ballet Folclórico Fundador Nicté Ha por sus 50 años de trayectoria, para culminar con un auténtico huateque con la participación artística de Ludy Solís, Immanel y Carlos Bustillo.
Esta celebración del 123 aniversario del territorio será una oportunidad para reencontrarse con los recuerdos, valores y raíces del quintanarroísmo que se niega al olvido y al abandono, en una tarde sabatina alegre junto a la Bahía, como en los viejos tiempos. Usted tiene la última palabra para asistir.

