CHETUMAL, QRoo.- La falsa apertura de Francisco López Mena para la comunidad universitaria y la sociedad en su conjunto se confrontó con la realidad durante su toma de protesta como rector de la Universidad de Quintana Roo (Uqroo), al no permitir el acceso a estudiantes, docentes, trabajadores y medios de comunicación al acto protocolario realizado en la Sala de Rectores.
El evento de consumación de la imposición estaba planteado a las 14:15 horas, sin embargo 30 minutos antes integrantes del Sindicato de Trabajadores Administrativos y Académicos de la Universidad de Quintana Roo (SAUQROO) arribaron a la parte baja de la rectoría para manifestarse y exigir a López Mena fecha específica para el inicio formal de negociaciones de su contrato colectivo, trabado por cuestiones administrativas.
La protesta también incluyó consignas contra el ahora ex rector Ángel Rivero Palomo, a quien a través de memes le demostraban su poco aprecio: “ARP, dice mi mamá por qué no te llevas a toda tu gente” o “vuela, vuela palomo vuela, vuela hasta que duela”. También llevaban consigo mantas con la leyenda: “¡certeza, justicia y equidad!” y “con o sin notificación, nos ampara la Constitución”.
No podía faltar una bandera roja y otra negra, que simboliza la huelga, así como una bandera nacional. En este marco el secretario general del sindicato, Mario Vargas Paredes, dejó en claro que “Rivero Palomo no fue dueño de la universidad y López Mena tampoco lo será, la Uqroo es propiedad de la comunidad universitaria”.
Tras manifestarse, el grupo de sindicalizados subió al segundo piso y se plantó en la entrada de la Sala de Rectores, lugar en donde se llevaría la sesión solemne e iniciaron consignas para que fueran atendidas sus demandas, momento en el que llegó a sus nuevas oficinas López Mena, a quien no le quedó más que escuchar a los integrantes del SAUQROO.
Posteriormente se dirigió a sus oficinas ubicadas a un costado del lugar pactado para el evento protocolario.
Los invitados comenzaron a llegar y fue en ese momento cuando se informó a los medios de comunicación que no habría acceso, por lo que solo ingresarían los integrantes de la Junta Directiva, el gobernador Carlos Joaquín González e invitados especiales.
Alumnos, docentes, sindicalizados y demás miembros de la comunidad universitaria quedaron relegados de la Sala de Rectores, en donde incluso entraron elementos de seguridad del gobernador, armados.
El encargado del despacho de la Secretaría de Gobierno arribó a las 14:33 minutos, mientras que el cuestionado integrante de la Junta Directiva, y oficial mayor, Manuel Alamilla Ceballos lo hizo siete minutos después y para quedar bien, saludó a cuanto se le atravesó en el camino.
Fue a las 14:45 horas cuando el gobernador llegó en su Suburban blanca y blindada, con otra de escolta y acompañado por el cuestionado presidente de la Gran Comisión del Congreso local, Eduardo Martínez Arcila. Ambos fueron recibidos por López Mena y Juan Xacur Maiza, presidente de la Junta Directiva.
El ex secretario de Gobierno literalmente se le colgó al gobernador al saludarlo y su sonrisa de oreja a oreja era imposible no verla. Posterior a los abrazos subieron 24 escalones hasta llegar a la entrada de la Rectoría, por donde ingresaron para no atravesar el mundo de integrantes de la comunidad universitaria que no se cansaban de gritar consignas.
De la rectoría ingresaron a la Sala de Rectores a través de un pasadizo, para dar inicio al acto protocolario, momento en que “sellaron” las puertas y no pasó ningún invitado más.
En el sitio se colocó una mesa para el presídium que estaba conformado por Joaquín González y 10 miembros de la Junta Directiva, el onceavo integrante, Carlos Alcérreca Joaquín, quien es pariente del gobernador, no llegó; tampoco estuvo presente Rivero Palomo.
López Mena fue sentado en la primera fila de los aproximadamente 70 invitados especiales, en su mayoría funcionarios públicos y gente que no tiene nada que ver con la universidad. Algunos ex rectores estuvieron presentes como Efraín Villanueva Arcos y Francisco Rosado May.
Durante la presentación de las autoridades los manifestantes que se encontraban en las afueras de la sala de rectores gritaron ¡autonomía! al momento que nombraron a Carlos Joaquín y ¡fuera! al tiempo que se pronunció el nombre de Xacur Maiza.
Al momento de la toma de protesta de López Mena también arreciaron las consignas y se dio paso a su discurso en el cual lo más destacable fue agradecer el “regalo de cumpleaños” al nombrarlo rector de la máxima casa de estudios, para el periodo 2019-2023.
Reiteró total espacio de apertura para la comunidad universitaria, lo cual contrastó con las decenas de estudiantes, trabajadores y académicos que no pudieron ingresar al acto protocolario.
Durante su discurso, Joaquín González solamente una vez mencionó a López Mena y fue muy cuidadoso de no volverlo hacer. Al término de su mensaje se tomó la foto oficial.
Los reporteros y demás representantes de los medios de comunicación tuvieron que sacar sus fotografías y transmisiones en vivo desde un monitor que se colocó afuera del recinto.
Tras concluido el evento los integrantes del SAUQROO intentaron hablar con el gobernador, sin embargo no pudieron porque se las ingenió para “driblearlos”. Incluso las Suburbans fueron movidas en varias ocasiones, hasta que encontró camino libre y se retiró, lo cual fue cuestionado por los sindicalizados quienes señalaron: “qué pena que la máxima autoridad del estado haya huido de esa manera”.