La serie Emily in Paris regresó a Netflix con una quinta entrega que, más allá de la ligereza habitual, ha generado un consenso: la fórmula se agota. Mientras los fans y la crítica condenan los fallos narrativos y los romances forzados, el creador Darren Star ya revela ambiciosos, aunque inciertos, planes para una potencial Emily in Paris temporada 6.
El fracaso analítico de la quinta temporada
La quinta temporada, estrenada el 18 de diciembre, es catalogada por muchos como la más floja de la producción. La serie protagonizada por Lily Collins nunca fue aclamada por su excelencia, sino más bien considerada una “serie confort” con enredos superfluos. Sin embargo, en esta entrega, la trama no fue del todo bien recibida ni por la crítica ni por los fanáticos.
La historia central de la temporada mostró a Emily comenzar una nueva aventura en Roma, que de a poco se desmorona y obliga al equipo de marketing de la Agencia Grateau a volver a París y ocuparse de sus clientes. A esto se sumó su flamante relación con Marcello Muratori, que se tambaleaba entre el deber profesional y personal.
La crítica al cambio de locación y personajes
Uno de los principales señalamientos es que el cambio de locación no funcionó y solo sirvió para dilatar la historia y la progresión de la protagonista. Los críticos sugieren que el show solo logró repuntar cuando finalmente regresó a París.
Además, tampoco ayudó la introducción de nuevos personajes que no condujeron a ningún lado, diluyendo la narrativa principal:
- Minnie Driver: Su aparición, como una vieja conocida de Sylvie que trata de ayudar al equipo por una suma modesta, se sintió forzada y no aportó momentos genuinos de risa.
- Jake (Bryan Greenberg): Su inclusión en el episodio 6 hacía suponer que se trataba de un potencial nuevo interés amoroso para Emily. No obstante, su aparición no condujo a nada, dejando la pregunta abierta sobre su propósito narrativo en un solo episodio.
Romances forzados y la frustración de Gabriel
Los giros románticos también fueron objeto de duras críticas. El romance entre Alfie (Lucien Laviscount) y Mindy (Ashley Park) fue calificado como forzado por los guionistas. Esta relación no solo puso una traba a la amistad entre Mindy y Emily, sino que se sintió como un “recurso desesperado” para introducir drama en un relato que se percibió estancado durante buena parte de la temporada.
Respecto al destino de Gabriel (Lucas Bravo), si bien su relación con Emily ha sido una de las más importantes, esta temporada se sintió como una despedida para el personaje, ya que el actor había expresado su interés por salir de la serie. El episodio 9, La Belle Époque, tuvo el encuentro más honesto entre ambos, y se sintió como dos personas adultas que deciden darse el espacio que necesitan, sintiendo amor y respeto mutuo.
Sin embargo, el final dejó la puerta abierta a un posible reencuentro, ya que Emily decide terminar su relación con Marcello. Además, Sylvie informó a Gabriel que Emily estaba de regreso en París y soltera.
El futuro de la trama según Darren Star
Tras el cierre de la temporada que dejó a los fans con las maletas listas entre Roma y París, la gran pregunta es si habrá una sexta temporada. Aunque Netflix no ha dado la luz verde oficial, el creador de la serie, Darren Star, ha sido muy claro sobre sus intenciones en una entrevista reciente para The Hollywood Reporter.
París como el núcleo innegociable
Star enfatizó que la base de Emily Cooper se mantendrá en Francia, a pesar de los viajes europeos. “La conclusión aclara que París no es algo temporal para ella; es donde quiere vivir y trabajar”, explicó.
Si se aprueba la Emily in Paris temporada 6, Star mencionó que los desafíos incluirían la gestión de oficinas en dos ciudades simultáneamente, algo que el creador califica como “la realidad del esfuerzo de no abarcar demasiado”. Esto sugiere que se explorará la posibilidad de que Emily se quede, o al menos tenga responsabilidades, en la nueva oficina de Roma, aunque París siga siendo su hogar.
Emily Cooper y su evolución profesional
Darren Star busca explorar una Emily mucho más segura en su carrera dentro de Agence Grateau. El creador mencionó que le entusiasma ver cómo la protagonista se ha vuelto más independiente: “Ha crecido mucho en su trabajo… se siente más arraigada, más segura de sí misma”.
El destino incierto con Gabriel
Sobre la posibilidad de que Emily acepte la invitación de Gabriel a Grecia, Star fue enigmático, calificándolo como una “insinuación”. Agregó que la decisión de la protagonista debe estar motivada por la historia. “Espero que Emily diga que sí, pero no estoy seguro de que lo haga”, comentó Star, destacando que la relación con Gabriel fue más profunda que cualquier otra que Emily haya tenido, pues fue vulnerable con él y él con ella.
Tras una quinta temporada que no cumplió las expectativas, la sensación general es que Emily in Paris debería empezar a planear su final de una vez por todas. Sin embargo, los planes de Darren Star sugieren que el viaje de la publicista favorita está lejos de terminar. ¿Logrará el creador revivir el interés explorando una Emily más profesional y resolviendo, o desechando definitivamente, el dilema amoroso con Gabriel?
