CIUDAD DE MÉXICO.- El lunes pasado, el Senado de la República avaló a la reforma la Ley General de Vida Silvestre, que tiene como objetivo la prohibición del uso de mamíferos marinos como los delfines, orcas y lobos marinos, entre otras especies, para espectáculos fijos o itinerantes.
Con 99 votas a favor, los senadores avalaron la reforma por esta iniciativa de ley que prohíbe utilizar a estos animales para cualquier fin que no sea científico, educativo o con propósitos de conservación y preservación, de acuerdo a Proceso.
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La nueva reforma declara, que, para el caso del grupo de los cetáceos, las especies deben estar ubicadas en corrales marinos y no en instalaciones de concreto, como alboreas y estanques; cuando no pueda realizarse esto, los cetáceos deben permanecer en instalaciones abiertas que reciban intercambio de agua del exterior, ya sea por medio de un sistema de bombeo o el flujo de mareas.
El dictamen señala que a quienes se les descubra manejando a estas especies en lugares confinados o si se detectan inconsistencias, se les retirará la autorización de aprovechamiento a los predios y Unidades de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre, según Noticiasdeméxico.
Declara también que queda prohibido capturar y reproducir a las especies de manera intensiva, si no se llevan a cabo dichas actividades bajo fines de repoblación, reintroducción o translocación de las especies y en dado caso, las investigaciones que se realicen a los mamíferos marinos tendrán que estar avaladas por una institución académica o de investigación que cuenten con registro oficial y con un protocolo autorizado.
Se trasladarán a los mamíferos marinos en contingencia
Sin embargo, fue regresado a la Cámara de Diputados este dictamen, ya que se aceptaron reservas de la senadora Maki Esther Ortiz Domínguez, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, al artículo 60 bis y modificaciones a los artículos 47 bis, 122 y 127, así como a varias disposiciones transitorias de la ley.
Noticiasdeméxico señala que en casos de contingencia, emergencia zoosanitaria o cualquier otra situación que ponga en riesgo la vida de los mamíferos acuáticos, se deberá realizar el traslado de las especies de manera temporal a instalaciones sin contacto o comunicación directa con el mar, para garantizar su bienestar.
Por último, la nueva ley estipula que ningún ejemplar de primate, de cualquier especie, podrá ser empleado con fines de aprovechamiento atractivo, ya sea comercial o de subsistencia. Además, sólo se autorizará su captura para actividades con objetivo de restauración, repoblamiento y de reintroducción de dichas especies en su hábitat natural, del mismo modo que con los mamíferos marinos.
