PLAYA DEL CARMEN, QR.- Cuando cumplió la mayoría de edad, Viviana Arcos comenzó a conocer boutiques y empezó a trabajar en tiendas de hoteles. En ese tiempo también se tomó el tiempo para estudiar inglés y cuando sintió que ya estaba lista para retomar sus estudios formales, ahorró, tomó el turno nocturno en su trabajo e hizo el examen para poder ingresar a la Universidad del Caribe.
Viviana Arcos es el ejemplo de cultura del esfuerzo. Vivía y trabajaba en la Riviera Maya, pero todos los días viajaba a Cancún para estudiar por la tarde. Dormir un promedio de tres horas y viajar en autobús no fue un obstáculo, pero aún con su juventud a cuestas, decidió mudarse a Cancún y cambiar de turno escolar y de trabajo.
También te puede interesar: Hecho en Quintana Roo: Crea la marca MYG arte deportivo mexicano
Fue en la materia de Comercio, que estaba relacionada con la exportación e importación de algún tipo de producto, en la universidad, combinada con la influencia de los oficios de su mamá (modista) y de su papá (sastre), cuando Viviana Arcos pensó en hacer un proyecto relacionado con la importación de telas. En la última hoja de ese trabajo escolar, la maestra le puso una nota: “ojalá que esto lo lleves a cabo y sea tu proyecto de vida en algún momento”.
La vida llevaría a Viviana Arcos a cumplir con lo que le había escrito su profesora, porque esa nota le había dejado la inquietud de tener un negocio propio o emprender algo, al terminar la universidad.
Sin embargo, reconoce que iniciar un proyecto no ha sido “tan fácil. Son varias cosas que tienes que pasar, y cada año son cosas nuevas. Durante tres años estuve trabajando mientras creábamos todo esto: La marca y la inversión”.
Dejar el trabajo que proporcionaba la estabilidad de un salario fijo y pasar al emprendimiento al ciento por ciento fue una decisión que la atemorizó, pero su marca, Playa del Bikini, basada en el diseño y confección de trajes de baño, estaba creciendo y le demandaba más tiempo. Al final optó por dejar su trabajo.
La empresa la inició con su mamá y con esta primera formación pasaron dos años; más adelante se incorporaron su hermana, su papá y una sobrina, quien hoy funge como un control de calidad.
Aún cuando la empresa es completamente familiar, cada integrante se encarga de determinada actividad y recibe un salario por ello.
Playa del Bikini lleva siete años de operación, “en los que hemos aprendido bastante y pasado por varias situaciones” y que cada una le ha dado experiencia y conocimiento, como haber sobrevivido a la pandemia del Covid-19, que le permitió crecer a nivel internacional. Exporta a Puerto Rico y Argentina.
Apoya la Sede a Viviana Arcos y Playa del Bikini
Viviana Arcos reconoce el valor del apoyo que la Secretaría de Desarrollo Económico (Sede) le ha dado a su marca, mediante espacios físicos como ferias de productos para emprendedoras locales y las pasarelas de moda en las que han representado no solo a Playa del Carmen, sino a Quintana Roo.
El deseo de Viviana por actualizarse en su actividad, la llevó a tomar talleres, y en uno de ellos, tuvo contacto con la marca Hecho en Quintana Roo, que expide un reconocimiento que respalda a las emprendedoras.
Playa del Bikini cuenta con un amplio catálogo de ropa de playa. En sus diseños combina modelos de texturas con lentejuelas, brillos y bordados. Sus diseños son personalizados.