CANCÚN, QR,- El Tren Maya, uno de los proyectos emblemáticos del gobierno federal, enfrenta un nuevo revés legal. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), encargada de la construcción de algunos tramos de esta megaobra, perdió un juicio que la obliga a pagar más de 86 millones de pesos a una empresa contratista, según información publicada por diversos medios de comunicación.

De acuerdo con Proceso, la resolución está relacionada con un incumplimiento de contrato en el Tramo 6 del Tren Maya, que conecta Tulum con Chetumal. El fallo, emitido por el Tribunal Federal de Justicia Administrativa, señala que la Sedena deberá indemnizar a la empresa demandante, lo que representa una afectación significativa al presupuesto destinado a la obra.

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El Tren Maya, cuya construcción inició en diciembre de 2018, está dividido en siete tramos que abarcan más de 1,500 kilómetros de recorrido a través de cinco estados del sureste mexicano: Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.

Concebido como un proyecto clave para impulsar el desarrollo económico, turístico y social de la región, su costo original estimado era de 120 mil millones de pesos; sin embargo, a la fecha, el costo ha aumentado significativamente, superando los 500 mil millones de pesos, según estimaciones oficiales recientes.

Diferencias por contrato en obra del Tren Maya

Por su parte, El Imparcial detalla que el conflicto legal se originó por discrepancias en los términos de los contratos firmados, los cuales no fueron cumplidos en su totalidad. La empresa alegó que hubo irregularidades en los pagos y falta de cumplimiento por parte de la dependencia militar, lo que derivó en una prolongada batalla legal que finalmente fue resuelta en favor de la parte demandante.

En la misma línea, Diario de Yucatán informa que este fallo podría retrasar el avance de las obras en el tramo afectado, ya que los recursos destinados a solventar esta deuda tendrán que ser reasignados de otros rubros del proyecto. El medio destaca que este tipo de contratiempos legales no solo afectan la imagen del Tren Maya, sino que también plantean dudas sobre la gestión y supervisión de los contratos adjudicados.

Este caso pone de manifiesto los retos legales y financieros que enfrenta el Tren Maya, considerado una obra prioritaria para el desarrollo económico y turístico del sureste de México. A medida que se acerca su fecha de inauguración, los problemas legales y presupuestales parecen ser un obstáculo adicional para cumplir con los objetivos planteados por el gobierno federal.

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