CANCÚN, QR.– El diputado Rubén Carrillo anunció este día su reincorporación oficial como secretario general del sindicato de taxistas “Andrés Quintana Roo”, luego de un período de licencia temporal. Mediante un comunicado, el líder sindical expresó su compromiso con los más de 20 mil integrantes de este gremio.
Rubén Carrillo señaló que su regreso obedece al “profundo respeto que le guarda a la voluntad de los socios”, quienes lo eligieron mediante una “votación abierta, transparente y democrática”.

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El secretario general del sindicato de taxistas reiteró que su prioridad es continuar trabajando en unidad, con responsabilidad y visión, para garantizar el orden y la proyección a futuro de la organización.
“Asumo nuevamente esta encomienda con la firme convicción de mantenerme al frente del sindicato, especialmente en este momento en que las decisiones que tomemos y las alianzas estratégicas que consolidemos marcarán el rumbo del gremio en los próximos años”, manifestó.
Carrillo enfatizó que el sindicato de taxistas atraviesa una “etapa de transformación” y consideró que es momento de fortalecer la representación sindical con base en el diálogo. “No hay lugar para divisiones ni intereses ajenos a la base trabajadora. El futuro del sindicato se construye con firmeza, unión y liderazgo claro”, añadió.
Finalmente, el también legislador adelantó que en los próximos meses impulsará acciones para consolidar la modernización del servicio de taxi, la mejora de las condiciones laborales y la defensa de los intereses de su gremio.
Cabe recordar que fue el 11 de octubre del año pasado cuando Rubén Carrillo solicitó un período de licencia temporal, luego de que taxistas se manifestaran, argumentando que este dirigente estaba más enfocado en ser diputado que en encabezar el sindicato. En su lugar quedó como dirigente interino Salomón Alfonso Muñoz, alias “Máfer”.
Una semana después de este hecho, José Luis Corral Morales, exasesor político de Rubén Carrillo, fue “levantado” y posteriormente hallado sin vida.
Por este caso, una semana después fueron detenidos Óscar Antonio Solís, comisionado del sindicato, y Salomón Alfonso Muñoz, alias “Máfer”, acusados de la presunta autoría intelectual de este asesinato.
Días más tarde, la Fiscalía General del Estado (FGE) realizó un cateo en las oficinas del sindicato, donde los agentes ministeriales hallaron drogas, armas y un cuarto de torturas.

