CANCÚN, QR.- Norma Kim es la fundadora de a marca Chipato. Su experiencia profesional fue en la hotelería y de ahí dio el salto para crear su microempresa. En este emprendimiento vio la necesidad de crear una asociación para empoderar a las mujeres ante el fenómeno de la violencia y para la protección de sus derechos.
En la asociación, al conocer a las mujeres que trabajan en los bazares y buscan distintas plataformas para la venta de sus productos, a Norma le empiezan a gustar las manualidades y comienza la idea de la marca Chipato.
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La emprendedora empezó con una pequeña producción de pulseras y a medida que avanzaba se dio cuenta de “la gama de materiales, piedras, cristales, hilos y todo lo que se puede manejar y las incontables herramientas que se utilizan”.
Norma también descubrió un mercado con mucha demanda. Por ejemplo, en los bazares “hay alguien que te vende el cuadro con pintura al óleo, pero hay seis o siete personas que te venden pulseras; es una actividad muy productiva”.
En los bazares le nació la idea de apoyar a más gente y hacerla productiva. Para ella, todo suma, y lo que hace la marca Chipato es acercar la capacitación que dan las instituciones oficiales a los lugares en donde las mujeres no pueden tomar un autobús: A las comunidades vulnerables y de alto riesgo.
Norma afirma que la marca Chipato tiene los recursos para poder capacitar a las mujeres, para enseñarlas a elaborar y a vender sus productos y acompañarlas en el registro de marca.
El catálogo de la marca Chipato
Aunque en la marca Chipato se hacen pulseras, se dedican más bien a todas las manualidades, bordado, tejido y reciclado, “lo que se nos ponga enfrente”.
La palabra Chipato proviene de la frase “Chingona para todo”, y lo que pretende demostrar Norma es que las mujeres son capaces de realizar sus manualidades. La marca Chipato nació en 2019 y el registro de marca lo obtuvo en 2021.
En el catálogo de productos de Chipato hay bordados, tejidos, bisutería y reciclado. En los bordados le apoyan mujeres de comunidades rurales.
Lo que diferencia a Chipato de otros negocios similares, es que sus clientes pueden comprar al mayoreo, al menudeo y al gusto.
Su primer contacto con la Secretaría de Desarrollo Económico (Sede) fue mediante una convocatoria que hizo la dependencia para todos los emprendedores para trabajar en el Party Center, en un área que había en el Centro de Convenciones de la Zona Hotelera de Cancún. Y ahí Norma empezó a recorrer “un camino maravilloso”.
En ese momento también se dio cuenta de que la Sede tenía una sala de capacitación, “donde puedes tomar los cursos para una formación completa”.
Reconoce que a Chipato la Sede la ha llevado de la mano para el registro de marca y al Hecho en Quintana Roo, con un coacheo muy cálido.
En el 2021 hubo una convocatoria para el 90 por ciento de descuento que ofrecía el IMPI y nos los envían a través de la Sede, recuerda Norma. Después de tres cursos con el IMPI, tomó la decisión y “hacemos el registro para la marca Hecho en Quintana Roo. Esto nos da imagen, presencia y nos ayuda a posicionarnos”.
Norma considera que las emprendedoras tienen la capacidad para hacer lo que quieran y les recomienda que se acerquen a las instituciones para que puedan desarrollar sus habilidades, porque esto las va a llevar de manera contundente a empoderarse, a ser productivas y a descubrirse ellas mismas en este mundo del emprendimiento.