CHETUMAL, QRoo.- En el Congreso del Estado al momento hay cinco iniciativas de reforma ingresadas para que los diputados puedan sesionar de forma virtual, hasta el momento ninguna de las dos comisiones encargadas ha sesionado para su análisis. Sin embargo, uno de los principales obstáculos para su aprobación es la “Ley Arcila” que continúa manipulando a la legislatura.
De acuerdo a la diputada Erika Castillo Acosta, una de las iniciativas presentadas para legalizar las sesiones virtuales, es de la bancada de Morena, en específico de Luis Fernando Chávez Zepeda, pero apoyada por ella y varios de sus compañeros del grupo parlamentario.
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Sin embargo todas las iniciativas relacionadas con el tema ingresaron después de los 63 días de parálisis legislativa, en la cual los 25 diputados acumularon alrededor de 70 propuestas de ley de manera general.
Castillo Acosta argumentó que varios integrantes de la XVI Legislatura pretendieron reiniciar labores desde el inicio de la pandemia por Covid-19 en Quintana Roo y luego de que la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) determinó suspender las actividades en el Congreso del Estado.
Recordó que 12 diputados de Morena, Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT) se presentaron en las instalaciones del recinto legislativo, pero por instrucciones de la presidenta de la Jugocopo, Reyna Durán Ovando, no se les permitió el acceso, ni siquiera para sacar sus pertenencias y documentos de trabajo.
Ante la situación que prevalecía con respeto a la emergencia sanitaria desde el reinicio de actividades el 21 de mayo pasado, comenzaron a ingresar iniciativas relacionadas con el tema de las sesiones virtuales, para no seguir atrasando las labores legislativas, sin embargo, no han hecho mucho eco y solo se han enviado a comisiones.
Propuestas, en “stand by”
La propuesta de la ley en la materia que presentó Morena busca reformar la Constitución Política del Estado de Quintana Roo, la Ley Orgánica del Congreso del Estado, Reglamento Interior del Poder Legislativo y el Reglamento de Comisiones, para poder realizar sesiones virtuales ante una emergencia sanitaria, por desastre natural o seguridad. Para ello se deberá contar con un Manual de Reglas de Operación, sobre todo para definir específicamente la forma de votar las iniciativas.
Sin embargo todas estas iniciativas se encuentran en “stand by”, pues al momento ninguna de las dos comisiones responsables Puntos Constitucionales, Puntos Legislativos y Técnica Parlamentaria ha convocado para el análisis de dichas propuestas de reforma. La Primera es presidida por la presidenta de la Jugocopo, Reyna Durán Ovando y la segunda por el diputado petista, Roberto Erales Jiménez.
No obstante según Castillo Acosta, secretaria de la Comisión de Puntos Constitucionales, la obligación de convocar a sesiones es de los presidentes de las comisiones, por lo que hasta ahora nada ha ocurrido.
El obstáculo mayor de acuerdo a la legisladora por el VI Distrito es el diputado panista Eduardo Martínez Arcila, y su bancada, que sigue manipulando el Congreso del Estado y puso en la Comisión Permanente para el receso legislativo a diputados a modo: José Luis Guillén López como presidente, José Luis Toledo Medina como secretario y también se incluyó él como secretario. Ninguno de estos legisladores son verdaderos representantes populares, pues todos obtuvieron su cargo por la vía plurinominal y solo es para entorpecer el trabajo legislativo, de acuerdo según Castillo Acosta.
La legisladora dijo que esta “Ley Arcila” es el verdadero obstáculo para que el Congreso del Estado funcione adecuadamente, toda vez que esta Comisión Permanente es la responsable también de llamar a un periodo extraordinario para aprobar las iniciativas trascendentes que quedaron pendientes durante el periodo de 63 días que no laboró la legislatura.
Es claro que el Congreso del Estado está divido en dos partes, los diputados que trabajan a favor de la sociedad y los legisladores que trabajan para el sistema. “Es triste que lo diga pero hace falta transparencia, honestidad y compromiso, la Jugocopo está integrada por un grupo de canijos”, agregó.
Ejemplo de la forma en que se opera en la legislatura fue el reinicio de la las actividades legislativas, pues siete de los nueve diputados por Morena tomaron la determinación de cambiar a Durán Ovando de la coordinación del grupo parlamentario y por ende de la presidencia de la Jugocopo, sin embargo la misma Jugocopo aprovechó la pandemia para suspender las actividades y con ello no permitir su caída. Una vez más, manipulado por Martínez Arcila.
Castillo Acosta reveló que para reiniciar las labores, la condición que pusieron los diputados integrantes de la Jugocopo: Atenea Gómez Ricalde, Carlos Hernández Blanco, José de la Peña Ruiz de Chávez, Pedro Pérez Díaz, Ana Pamplona, José Luis Toledo Medina, José Luis Guillén López y la propia Reyna Durán, fue que desistieran en su intención de cambiar a la actual líder del Congreso del Estado, de lo contrario, se terminaría el año de ejercicio sin actividades legislativas.
Los siete diputados en contra tuvieron que “ceder” para retomar las actividades en el Congreso del Estado, sin embargo, parece que de poco o nada sirvió porque el que sigue manipulando el Poder Legislativo es Martínez Arcila y las iniciativas siguen sin ser analizadas.
De no haber periodo extraordinario en este receso legislativo las iniciativas pendientes, en su caso, se aprobarían del próximo 6 de septiembre en adelante cuando inicia el segundo año de ejercicio constitucional y cuyo liderazgo de la Jugocopo corresponde al Grupo Parlamentario de Acción Nacional (PAN).
Por el momento lo único acordado es la apertura los lunes de la Oficialía de Partes exclusivamente para ingresar iniciativas y la sesión de la Comisión Permanente únicamente los miércoles de cada semana, de forma presencial.
