CANCÚN, QR.- Esther Crawford, ex ejecutiva de Twitter, compartió una experiencia angustiante, en la que ella y su esposo se vieron envueltos en un violento enfrentamiento con un grupo de taxistas, a los que consideró parte de una mafia. La pareja había solicitado un vehículo de Uber tras una cena en un restaurante en la Zona Hotelera.
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Según Crawford, poco después del atardecer y de disfrutar de una cena, pidieron un servicio de Uber para regresar a su hotel.
Sin embargo, su viaje tranquilo se convirtió en un episodio alarmante cuando su vehículo fue rodeado por un grupo de hombres.
Estos individuos atacaron al conductor del Uber mientras Esther Crawford y su esposo se encontraban en los asientos traseros del vehículo.
A través de una publicación en sus redes sociales, relata que a pesar de recibir golpes y agresiones a través de la ventana del auto, el conductor del Uber mantuvo la calma en todo momento, revela Palco Quintanarroense.
Uno de los agresores incluso intentó introducirse en el vehículo, aparentemente con la intención de quitar las llaves. Durante el incidente, los hombres reiteradamente amenazaron al conductor por haber aceptado el servicio de transporte en su zona.
Esther Crawford admitió que, en retrospectiva, la acción más sensata hubiera sido abandonar el vehículo y buscar seguridad.
Defiende al conductor de Uber
No obstante, en un acto de valentía, ella decidió bajar la ventana del auto y explicar que ella era la responsable de haber solicitado el servicio de Uber.
Su intención era persuadir a los agresores para que les permitieran marcharse y asegurarse de que el conductor no se sintiera solo en esa peligrosa situación.
Esther Crawford confesó que en ese momento desconocía las posibles consecuencias de huir del lugar. La ex ejecutiva de Twitter expresó su conmoción por la experiencia, pero también su alivio por el hecho de que la situación no escalara aún más. El incidente la llevó a reflexionar sobre la rapidez con la que una situación puede transformarse de positiva a aterradora.
Como muestra de agradecimiento y apoyo al conductor, la pareja le entregó una generosa propina. Sin embargo, Esther Crawford subrayó que ser víctima de acoso y agresión es una experiencia terrible.
Esta situación la llevó a cuestionar la corrupción sistémica y la codicia que a menudo prevalecen en diferentes partes del mundo, impactando negativamente a personas que luchan por ganarse la vida de manera honesta.
En palabras de Esther Crawford: “¡Qué experiencia tan surrealista y desconcertante!”
En los más de 350 comentarios en el post hay manifestaciones de preocupación y estadounidenses que señalan que pensaban venir a Cancún, pero ahora tienen miedo de hacerlo, pues no quieren enfrentarse a una situación similar.
Otros señalan que vivieron experiencias similares y recomiendan que por el momento no usen Uber en Cancún.