David Acosta | R360
CHETUMAL, QRoo.- Algunas pequeñas flamas e hileras de humo todavía se podían observar. El olor a quemado era perceptible desde la carretera. Más de 15 mil metros cuadrados de vegetación se consumieron, en su mayoría pasto y arbustos; la fauna, desapareció.
El pasado sábado cerca del mediodía un reporte ciudadano informó sobre el incendio que se registraba en los humedades de esta ciudad, bautizados como “la sabana de Expofer”. Al lugar arribaron bomberos del ayuntamiento de Othón P. Blanco y hasta elementos de la Marina; el fuego fue controlado y presuntamente extinguido.
También te puede interersar: La lenta agonía de la sabana de Chetumal
La humareda que generó complicaba la circulación vehicular, por lo que en redes sociales se alertaba a la población de cruzar con precaución en la avenida Insurgentes, una de las dos arterias de acceso a la ciudad. Los trabajos terminaron hasta entrada la tarde-noche.
Este espacio de biodiversidad se ubica a un costado de los terrenos donde se realiza la Feria de la Frontera Sur Expofer y a unos metros del Centro de Rehabilitación Integral de Quintana Roo (CRIQ). El primer siniestro incluso se pensó eras en estas últimas instalaciones.
Cuando se creía que la situación no pasaría a más, el domingo otro reporte se generó durante la mañana y de nueva cuenta se tuvo que enviar a 12 bomberos, dos pipas, una ambulancia, y personal de la Secretaría de Marina (Semar) para las tareas de control y extinción del fuego, cuyas llamas rebasaron los cinco metros de altura.
Personal de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) no llegó bajo el argumento de que se trató de un incendio “urbano”.
El reporte previo sobre la causa del incendio fue considerado como “efecto lupa”, es decir algún cristal que como consecuencia de las altas temperaturas, superiores a los 36 grados, prendió la maleza. Aunque tampoco se negó la idea de que el siniestro haya sido provocado.
La ola de calor es uno de las teorías de la sequía en esta zona de humedales que comprenden más de 100 hectáreas, sin embargo es la única zona que no se ha podido desarrollar porque también incluye manglar y el estanque lleno alberga una gran cantidad de especies animales, como loros, águilas, halcones, patos, garzas, zarigüeyas, lagartos, peces y caracoles.
La zona en cuestión está rodeada por el fraccionamiento Marsella, el propio aeropuerto de Chetumal, el Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA) Número 11, además del CRIQ y el Expofer, ya señalados. No hubo necesidad de evacuación.
Un día después…
Este lunes en el sitio se observó cenizas en gran parte del suelo, pastizales y arbustos quemados, algunos árboles de mediana estatura con poca probabilidad de sobrevivir por los efectos del fuego, con ramas y hojas chamuscadas.
En el recorrido se constató que el fuego no estaba completamente extinguido: pequeñas llamas y fumarolas salían del suelo, que se negaban a morir pese a que el agua de las pipas había pasado sobre ellas.
No se observó ninguna especie de fauna en el sitio, solo se pudo ver algunos pequeños caracoles entre las cenizas, además de una cantidad considerable de basura, en especial botellas.
Un carro tanque de bomberos y una pipa, aún permanecían en la zona del siniestro tratando de eliminar completamente el fuego que se escondía debajo de la maleza. Los bomberos intentaban extinguir la parte que se ubica pegado a los carriles donde se realizan las carreras de caballos del Expofer, en donde el fuego a nada estuvo de consumir el “arrancadero”.
Según el personal de Bomberos sería este lunes que quedaría sofocado el incendio al 100 por ciento, que consumió más de 15 mil metros cuadrados de vegetación.