CHICAGO, ILL.-La audiencia de estatus de Ovidio Guzmán López, alias El Ratón, programada inicialmente para el 31 de marzo de 2025 en la Corte Federal de Chicago, fue pospuesta. La razón principal de este aplazamiento fue otorgar más tiempo a la fiscalía y a la defensa para negociar un posible acuerdo de culpabilidad.
Guzmán López, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, enfrenta múltiples cargos en Estados Unidos, incluyendo tráfico internacional de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana, así como crimen organizado y posesión ilegal de armas. La fiscalía sostiene que operó junto a figuras prominentes del narcotráfico mexicano, como su padre e Ismael El Mayo Zambada.
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El aplazamiento de la audiencia sugiere que las conversaciones para un plea deal (acuerdo de declaración de culpabilidad) están avanzadas, lo que podría evitar un largo juicio. Este tipo de acuerdos suelen implicar una reducción de penas a cambio de información clave sobre las operaciones del Cártel de Sinaloa.

Antecedentes y captura
Ovidio Guzmán López fue capturado por primera vez el 17 de octubre de 2019 en Culiacán, Sinaloa, durante un operativo que desencadenó enfrentamientos armados en la ciudad. Sin embargo, fue liberado horas después para evitar un baño de sangre, según declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Posteriormente, fue recapturado el 5 de enero de 2023 en la localidad de Jesús María, Sinaloa, en un operativo que también provocó disturbios y enfrentamientos en la región. Tras su detención, fue trasladado a la Ciudad de México y posteriormente ingresado al penal de máxima seguridad El Altiplano.
El 15 de septiembre de 2023, fue extraditado a Estados Unidos, donde enfrenta cargos por tráfico de drogas y lavado de dinero.
Quién es Ovidio Guzmán López
Nacido el 29 de marzo de 1990 en Culiacán, Sinaloa, Ovidio Guzmán López es uno de los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán y Griselda López Pérez. Creció en la Ciudad de México y cursó parte de su educación en el colegio CEYCA, una institución exclusiva en el sur de la capital.
Desde joven, Ovidio se involucró en las actividades del Cártel de Sinaloa, especialmente tras la muerte de su hermano Édgar Guzmán en 2008. Junto a sus hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo, formó parte de la facción conocida como Los Chapitos, que asumió el liderazgo del cártel tras la captura de su padre en 2016.
Las autoridades estadounidenses lo acusan de liderar una organización criminal transnacional dedicada al tráfico de cocaína, metanfetamina y marihuana desde 2008. Además, se le atribuye la operación de múltiples narcolaboratorios en Sinaloa y el uso de diversas rutas para el transporte de drogas hacia Estados Unidos.
Implicaciones del acuerdo

Un posible acuerdo de culpabilidad por parte de Ovidio Guzmán López podría tener repercusiones significativas en la lucha contra el narcotráfico. Al colaborar con las autoridades estadounidenses, podría proporcionar información valiosa sobre las operaciones internas del Cártel de Sinaloa y sus vínculos internacionales.
Sin embargo, también podría generar tensiones dentro del cártel y entre sus líderes, especialmente si se percibe como una traición por parte de Los Chapitos. Además, su colaboración podría poner en riesgo su seguridad y la de su familia, dada la naturaleza violenta de las organizaciones criminales.
La próxima audiencia de Ovidio Guzmán López está programada para el 9 de julio de 2025, en la que se espera se formalice su declaración de culpabilidad y se conozcan los términos del acuerdo alcanzado con la fiscalía.