CANCÚN, QR.- Las garrapatas son parásitos externos que se alimentan de la sangre de animales y humanos. Su aparición puede deberse a diversos factores ambientales y de comportamiento de las mascotas.
Suelen habitar en áreas con alta vegetación, como jardines, parques y bosques, escondiéndose en la hierba alta y en arbustos, esperando que un huésped pase cerca para adherirse a él. Las mascotas que frecuentan estos lugares tienen un mayor riesgo de ser infestadas. El clima también juega un papel crucial en la proliferación de garrapatas.
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Estos parásitos prosperan en climas cálidos y húmedos, por lo que son más comunes durante la primavera y el verano. Durante estas temporadas de calor y humedad, las garrapatas se vuelven más activas y su población aumenta considerablemente. Sin embargo, en regiones con inviernos suaves, las garrapatas pueden estar presentes durante todo el año.
Causas de la Aparición de Garrapatas en Mascotas
- Falta de prevención: La ausencia de medidas preventivas adecuadas aumenta el riesgo de infestación. No utilizar productos antiparasitarios, como collares, pipetas, champús y sprays, deja a las mascotas vulnerables a las garrapatas. La falta de revisiones regulares del pelaje también contribuye a que los parásitos pasen desapercibidos y se adhieran firmemente.
- Contacto con otros animales: Las garrapatas pueden transferirse de un animal a otro. Las mascotas que interactúan con otros animales, ya sea en el hogar, en el parque o en el veterinario, tienen un mayor riesgo de infestación. Las garrapatas pueden pasar de un huésped infestado a otro durante estos contactos, por lo que es recomendable revisarla luego de interacciones.
- Higiene del entorno: Un entorno sucio y desordenado, con acumulación de hojas, ramas y otros desechos, crea un hábitat ideal para las garrapatas.
- Movilidad de las mascotas: Las mascotas que pasan mucho tiempo al aire libre, especialmente en áreas rurales o boscosas, tienen un mayor riesgo de encontrar garrapatas. Los perros de caza, perros de trabajo y mascotas que acompañan a sus dueños en actividades al aire libre son particularmente susceptibles.
¿Cómo evitar las garrapatas?
- Collares antiparasitarios: Los collares antiparasitarios liberan sustancias químicas que repelen a las garrapatas, ofreciendo protección prolongada.
- Pipetas antiparasitarias: Las pipetas antiparasitarias, aplicadas en la piel de la mascota, brindan protección mensual contra garrapatas.
- Baños con champús especiales: El uso de champús especiales durante el baño ayuda a eliminar las garrapatas presentes y a prevenir nuevas infestaciones.
- Sprays y polvos antigarrapatas: Los sprays y polvos específicos son efectivos para repeler y eliminar garrapatas del pelaje de las mascotas.
- Revisiones regulares: Revisar regularmente el pelaje de la mascota, especialmente después de paseos en áreas con vegetación densa, permite detectar y eliminar garrapatas a tiempo.
- Aceites esenciales: Algunos aceites esenciales diluidos en agua pueden servir como repelentes naturales de garrapatas.
- Mantenimiento del entorno: Mantener el entorno limpio y sin maleza, cortando el césped y eliminando residuos orgánicos, reduce el riesgo de infestación.
- Alimentación saludable: Una alimentación adecuada fortalece el sistema inmunológico de las mascotas, haciéndolas menos vulnerables a los parásitos.
- Tratamientos veterinarios: Consultar con un veterinario es crucial para recibir recomendaciones específicas sobre productos y tratamientos preventivos.
- Remedios caseros: Algunos remedios caseros como la mezcla de vinagre de manzana con agua pueden ser útiles, siempre bajo supervisión veterinaria.
Enfermedades transmitidas por las garrapatas
- Enfermedad de Lyme: La enfermedad de Lyme es causada por la bacteria Borrelia burgdorferi. Las mascotas infectadas pueden presentar síntomas como fiebre, pérdida de apetito, cojera, inflamación de las articulaciones y letargo. Si no se trata a tiempo, esta enfermedad puede provocar daños a largo plazo en las articulaciones y el sistema nervioso.
- Ehrlichiosis: La ehrlichiosis es causada por varias especies de bacterias del género Ehrlichia. Los síntomas incluyen fiebre, pérdida de peso, sangrado anormal, anemia y problemas neurológicos. Esta enfermedad puede ser fatal si no se diagnostica y trata adecuadamente.
- Babesiosis: La babesiosis es provocada por parásitos del género Babesia, que infectan y destruyen los glóbulos rojos de la mascota. Los síntomas comunes son fiebre, anemia, ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), orina oscura y letargo. La babesiosis puede ser especialmente peligrosa en animales jóvenes o inmunocomprometidos.
- Anaplasmosis: La anaplasmosis, también conocida como fiebre de la garrapata, es causada por bacterias del género Anaplasma. Los síntomas incluyen fiebre, dolor muscular y articular, letargo, pérdida de apetito y problemas respiratorios. Aunque no siempre es fatal, puede causar complicaciones graves si no se trata.
- Hepatozoonosis: La hepatozoonosis es causada por parásitos del género Hepatozoon. A diferencia de otras enfermedades transmitidas por garrapatas, la mascota se infecta al ingerir una garrapata infectada. Los síntomas incluyen fiebre, dolor muscular, pérdida de peso, debilidad y parálisis. Esta enfermedad puede ser crónica y debilitante.
- Fiebre maculosa: La fiebre maculosa, también conocida como fiebre de las Montañas Rocosas, es causada por la bacteria Rickettsia rickettsii. Los síntomas incluyen fiebre alta, pérdida de apetito, tos, vómitos, diarrea y manchas en la piel. Esta enfermedad puede ser mortal si no se trata rápidamente.
