Los proyectos del sur, entre ellos el proyecto ancla del sexenio de Carlos Manuel Joaquín González, al que hoy da continuidad el gobierno de la Cuarta Transformación —el Parque Industrial con Recinto Fiscalizado Estratégico—, siguen sin operar, al igual que el Tianguis del Bienestar Yum Ka’ax de la presente administración estatal. El Polo de Desarrollo Económico para el Bienestar de Chetumal va por el mismo rumbo.
Los proyectos proyectos del sur para impulsar el desarrollo de Quintana Roo, en específico de la capital del estado, parecen estar destinados al fracaso. La experiencia hasta el momento indica que se trata de anuncios mediáticos para salir del paso y ganar tiempo, con inversiones que no logran tener efectos positivos en la región, y menos en la capital del estado, que no ve opciones tangibles para salir de la crisis económica que se mantiene desde hace varias administraciones.
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El multicitado Parque Industrial con Recinto Fiscalizado fue uno de los proyectos del sur que albergó esperanzas de los empresarios locales para salir del bache, pero con el paso del tiempo lo único que se confirmó es que se trató de una cortina de humo.
Fue uno de los proyectos del sur anunciado desde 2017 y contemplaba la construcción de 68 naves comerciales, pero en su inauguración, el 24 de agosto de 2021, solo fueron cuatro las edificadas. Funcionó por unos meses y posteriormente terminó por cerrar, pues solo tres empresas se interesaron. Improvisaciones, falta de competitividad, condiciones del proyecto y hasta incertidumbre jurídica del predio llevaron a su caída.
Pese a su fracaso, se invirtieron más de 30 millones de pesos. Hubo el compromiso de rescatarlo hasta el último minuto de la administración de Carlos Joaquín, pero terminó por pasar la estafeta al gobierno de la Cuarta Transformación, que hasta el momento no ha podido hacer nada por el parque, aunque se mantiene fiel al compromiso de ponerlo en operación, al menos en el discurso. Las instalaciones están en el abandono.
Proyectos del sur sin resultados en infraestructura económica
Para salir del paso, también se impulsó su propio proyecto, con el apoyo del gobierno federal: el Tianguis del Bienestar Yum Ka’ax, que desde un principio la actual administración comentó que serviría como complemento para impulsar el Parque Industrial con Recinto Fiscalizado Estratégico.
El tianguis fue anunciado desde 2023, con el compromiso de iniciar operaciones en diciembre de 2024. Las instalaciones también están abandonadas y, lejos de lo que se pensaba, su construcción es de mala calidad, y ya hay quien lo asemeja con el tianguis de la colonia Forjadores de Chetumal.
Contempla más de 14 mil metros cuadrados de locales y 50 mil de espacios abiertos, para mercados de productores y distribuidores. Además de oficinas y bodegas.
Es uno de los proyectos del sur que siguen sin arrancar, las instalaciones permanecen abandonadas y hasta la fecha se desconoce a ciencia cierta el monto de la inversión. Fue pensado para operar bajo el esquema de zona libre para Chetumal.
Empresarios locales no tienen ningún interés en aportar a estos proyectos, al señalar que no están hechos de acuerdo con las condiciones económicas de la región ni con el perfil empresarial de esta parte de la entidad. Lo peor es que tampoco hay iniciativa privada foránea interesada en invertir en estos esquemas de negocios.
Proyectos del sur se amplían con nuevo esquema federal
Pero, por si esto no fuera poco, el pasado 6 de agosto el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón, llegó a Chetumal para anunciar oficialmente el Polo de Desarrollo Económico para el Bienestar (Podecobi) de Chetumal, un nuevo esquema al que se anexarán el parque industrial y el tianguis del bienestar.
Este proyecto, que estará ubicado físicamente a un costado del parque industrial y del tianguis, busca ser proveedor de insumos para la zona turística del norte del estado. Pretende generar 16 mil empleos y apoyar a los productores locales, aunque empresarios han señalado que solo servirá para atraer inversionistas con alto poder adquisitivo, como la ensambladora de vehículos eléctricos anunciada por el propio Marcelo Ebrard; es decir, nuevamente no está diseñado para el empresariado local.
El Podecobi de Chetumal todavía no tiene fecha de arranque en su construcción, pues hace alrededor de una semana el secretario de Economía mencionó que los que inician su construcción en el primer trimestre de 2026 son: AIFA-Zapotlán, en Hidalgo; Huamantla, en Tlaxcala; Celaya, en Guanajuato; Morelia-Zinapécuaro, en Michoacán; y San José Chiapa-Nopalucan, en Puebla.
El de la capital del estado aún no figura en los planes inmediatos del gobierno federal, pese a que el titular de la Secretaría de Economía indicó que acudiría al menos una vez al mes para trabajar en el Podecobi, incluso acompañado de empresarios inversionistas.
Está por concluir un año más y la presente administración de Mara Lezama Espinosa se encuentra en su cuarto año, pero ninguno de los proyectos del sur, planteados desde el sexenio anterior, ha cuajado.
Aunque en el papel los proyectos del sur lucen atractivos, el problema para los gobiernos ha sido aterrizarlos. Los dos primeros difícilmente serán recuperados y el Podecobi parece comenzar a perfilarse hacia esa misma ruta.
Payo Obispo
La situación política en el estado, rumbo al proceso electoral de 2027, comienza a subir de temperatura. No solo en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se observa mayor divisionismo y fuego amigo, sino también en los demás partidos, pese a que algunos no tienen la más mínima oportunidad de lograr un espacio de elección popular. Sin embargo, en 2026 y 2027 lo más importante será lograr las candidaturas.
