KANTUNILKÍN, QR. Dos personas desaparecidas el pasado 10 de abril en Kantunilkín, municipio de Lázaro Cárdenas, fueron localizadas sin vida el 21 de abril en una zona de vegetación densa, ubicada en los alrededores del poblado de Leona Vicario, perteneciente al municipio de Puerto Morelos. Sus fichas de búsqueda fueron desactivadas.
Se trata de Osbert Nicolás de Atocha Valle Pinzón y Fernando Hermosillo Curiel. Ambos fueron vistos por última vez en el centro de Kantunilkín, donde se activaron las fichas de búsqueda tras su desaparición. Las labores para ubicarlos incluyeron acciones de campo, gabinete y trabajo técnico, coordinadas con el Grupo Interinstitucional.
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Durante un operativo de localización en el área verde, los restos de ambas personas fueron encontrados dentro de una bolsa negra. Personal pericial de la Fiscalía se encargó del levantamiento, así como del posterior traslado de los cuerpos al Servicio Médico Forense (Semefo) de Benito Juárez.
Tras realizar los análisis de identificación, la autoridad ministerial confirmó que se trataba de las dos personas desaparecidas, por lo que desactivó sus fichas y notificó a las familias, quienes recibieron los restos. La institución no ha detallado la causa de muerte ni ha informado sobre personas detenidas o líneas de investigación activas.
Hasta ahora, la Fiscalía no ha ofrecido una declaración oficial sobre si existe una carpeta de investigación abierta por homicidio u otro delito. Tampoco ha dado a conocer si hay indicios que relacionen el hecho con alguna actividad comercial, personal o delictiva en la región, de acuerdo con el boletín de prensa.
Redes sociales, contexto familiar y búsqueda de personas desaparecidas
En redes sociales, Juan Carlos Valle, hermano de Osbert, publicó un mensaje dirigido a su familiar desaparecido. En su publicación mencionó que la búsqueda fue una de las más extensas realizadas en la zona en los últimos años. También compartió detalles sobre la última conversación que sostuvo con él, la cual, según explicó, tuvo un tono distinto al habitual.
“Un día antes de tu último viaje, hablaste solo de mí. Me mandaste contactos y recomendaciones que no pedí. Hoy entiendo que te estabas despidiendo”, escribió. El mensaje también incluyó una frase de despedida en la que se da por hecho el fallecimiento: “Paz en mi corazón porque tú… ya descansas en paz”.
Osbert Valle, de 41 años, era propietario de una empresa que llevaba su nombre, dedicada a la venta y distribución de productos para el cabello en el estado de Quintana Roo. Su acompañante, Fernando Hermosillo Curiel, trabajaba con él y fue reportado como desaparecido al mismo tiempo.
Ambos fueron considerados personas desaparecidas desde el momento en que perdieron contacto con sus familias. La activación de sus fichas movilizó a las autoridades y a colectivos que han participado en búsquedas en distintos municipios del norte del estado. La Fiscalía confirmó su localización, pero no ha emitido declaraciones adicionales sobre el caso.
Los familiares, por su parte, comenzaron los procesos funerarios luego de recibir los cuerpos. En redes sociales, amigos y conocidos de las víctimas compartieron mensajes de condolencia, además de manifestar su preocupación por la situación de personas desaparecidas en el estado.
Durante este año, Quintana Roo ha registrado otros casos similares de personas desaparecidas, tanto en la zona norte como en la región sur. Diversos colectivos han reiterado la necesidad de fortalecer la capacidad institucional para responder a estos hechos, mejorar la coordinación interinstitucional y acelerar los procesos de identificación de restos humanos.
La falta de información oficial ha generado cuestionamientos sobre los procedimientos de investigación en casos de personas desaparecidas. En el caso específico de Valle y Hermosillo, las autoridades no han confirmado públicamente si el hallazgo está vinculado con algún hecho delictivo, ni han precisado si existen antecedentes relacionados.
Hasta el momento, no se ha difundido un parte médico ni se ha informado si el sitio del hallazgo fue asegurado como escena del crimen. La Fiscalía únicamente confirmó el hallazgo y la entrega de los restos, sin proporcionar más datos sobre el operativo ni sus resultados forenses.
El caso se mantiene en seguimiento por parte de medios locales y organizaciones civiles. Algunas de estas agrupaciones han señalado que los avances en las investigaciones suelen ser limitados, particularmente en los casos de personas desaparecidas que no tienen vínculos evidentes con estructuras criminales.
Las familias de las víctimas no han ofrecido declaraciones posteriores a la entrega de los restos. Tampoco se ha confirmado si acudirán ante otras instancias, como la Comisión Estatal de Búsqueda o la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, para solicitar acompañamiento legal o psicológico, reporta Ruptura 360.
