Jazmín Ramos | R360
CANCÚN, QRoo.- La industria de la construcción ha sido de los sectores más afectados en Quintana Roo por la acciones de contención contra el Covid-19, en donde más de 100 mil albañiles se encuentran desempleados por la suspensión del 90% de las obras, sin embargo, se espera que las actividades se reactiven a mediados de junio al declararse como una actividad esencial, indicó que José Pech Alfaro, líder del Sindicato de los Trabajadores de la Construcción (Sitec).
En entrevista para Ruptura 360, explicó que el 80 por ciento de los trabajadores del ramo fueron dados de baja de manera provisional, por lo que tuvieron que regresar a sus lugares de origen, la mayoría radicados en los estados de Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas, quienes están a la expectativas del reinicio de las obras, lo cual, estará sujeto a la disposiciones del plan de la nueva normalidad mediante el esquema del semáforo.
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“La situación ha sido muy difícil, hay compañeros que no la están pasando nada bien, los ingresos escasean; algunos han tenido que salir a realizar trabajos a casas particulares u obras menores, con el riesgo del contagio, pero existe la necesidad de conseguir dinero para la manutención de la familia”, refirió.
Mencionó que lo único que les da esperanza, es el hecho de que las autoridades federales hayan declarado a la industria de la construcción como prioritaria, pues eso significa que al momento de que se levante el confinamiento, serán de las primeras en reactivarse, entonces, posiblemente a mediados de junio ya se estarán reiniciando las obras.
“Estamos atentos a lo que digan las autoridades, una buena señal es que las construcción esté dentro de las actividades prioritarias, debemos verlo con optimismo, pues si bien Quintana Roo es uno de los estados con una tasa elevada de contagios, lo que implica que al entrar el esquema de semáforo iniciará en rojo, las empresas del giro sí tendrán luz verde para reactivarse”.
Señaló que están conscientes de que todo dependerá de lo que digan las autoridades estatales y federales conforme al plan de regreso a la nueva normalidad, no obstante, el que se contemple como una industria prioritaria, da esperanza de que pronto se dinamizará el sector, ya que realmente los trabajadores se encuentran en una situación muy difícil.
Protocolos en las obras
En cuanto a la aplicación de protocolos en las obras, dijo, que los patrones se ajustarán a las certificaciones que impusieron las autoridades, además se deben sanitizar las obras y crear dormitorios que cumplan con las condiciones sanitarias, pues aún cuando el trabajo que se realiza en las obras sí marca una distancia considerable de un trabajador a otro, a la hora del consumo de los alimentos y descansar, sí socializan.
“Se tienen que garantizar las condiciones de higiene, sobre todo en las zonas dedicadas a los alimentos y al descanso una vez que terminan la jornada laboral, generalmente se improvisan galeras o cuartos de madera, pero las condiciones han cambiado, se tienen que seguir protocolos a los que deben ajustarse las constructoras; las autoridades sanitarias y la secretaría del Trabajo serán fiscalizadoras.
Pech Alfaro, mencionó, que una vez que el gobierno dé luz verde para reiniciar la actividad, un total de 120 mil trabajadores podrán ir recuperando paulatinamente sus empleos, quienes fueron dados de baja tras detectarse el primer caso de Covid-19 en Quintana Roo; de estos, el 80% regresó a sus lugares de origen.
“Ahorita estamos sobrevivido como podemos, algunos se arriesgan realizando ‘chambitas’, otros están realizando obras particulares y hay quienes de plano están trabajando de lo que encuentran, ya que al paralizarse las obras perdieron el 100 por ciento de sus ingresos”.