CHETUMAL, QR.– El módulo de registro del programa Viviendas para el Bienestar, instalado en esta ciudad, dejó fuera a personas que acudieron a tiempo para presentar sus documentos.
En el último día de registro, los interesados formaron dos filas: por un lado, quienes ya tenían ficha del día anterior, y por el otro, los recién llegados. El módulo abrió a las 09:00 horas en punto.
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Conflictos marcan el cierre de inscripción de Viviendas para el Bienestar
Durante un recorrido realizado por Ruptura 360 se observaron familias completas; algunas llevaron hamacas para que sus hijos descansaran mientras esperaban su turno. Las personas portaban gorras y utilizaban sombrillas o telas para protegerse del sol. Algunas disfrutaron temporalmente de la sombra.
Motivados por las experiencias de los cuatro días anteriores, los interesados llevaron bancas y mesas, así como alimentos. Vendedores ambulantes, tiendas y negocios de comida resultaron beneficiados por la afluencia.
Llevaban agua y bebidas, tras el incidente del pasado jueves, cuando una persona se desmayó por deshidratación. La ambulancia no llegó y fue trasladada por policías a un hospital para su atención médica.

Tras este hecho, una empresa de agua purificada ubicada frente a la escuela Centenario de la Revolución, donde se instaló el módulo, ofreció agua y servicios sanitarios gratuitos. A diferencia de otras ocasiones, el último día se observó a muchos niños, incluso bebés, que tuvieron que ser acompañados por sus padres al no contar con familiares que los cuidaran.
Adultos mayores y personas con discapacidad también tuvieron que formarse en la fila para realizar su trámite. La fila más larga se extendió aproximadamente 200 metros, cerca de dos calles y media.
No solo había personas formadas, sino también vehículos y motocicletas, lo que asemejaba un corralón de tránsito, de todas las marcas y modelos, bajo pleno sol. Cerca de la hora de cierre, las familias se pusieron nerviosas ante la posibilidad de no alcanzar registro.

La gente continuó llegando durante todo el horario de atención; sin embargo, decenas no pudieron realizar su trámite, especialmente quienes llegaron entre las 14:00 y 15:00 horas. Un ejemplo es doña Guadalupe Solís, quien llegó al módulo a las 14:20 horas y le informaron que ya no se aceptaban trámites.
Muchos otros en la misma situación expresaron su inconformidad. El módulo fija un horario de atención de 09:00 a 15:00 horas, por lo que quienes no asistieron antes o tuvieron compromisos laborales no pudieron registrarse.
Programa Viviendas para el Bienestar registra largas filas en Chetumal
Durante los cinco días de registro, del 11 al 15 de agosto, se registraron comentarios y señalamientos. Se observó la presencia de recomendados y presuntos familiares de los encargados del programa y del módulo. Algunas personas ofrecieron cuidar lugares por hasta 800 pesos diarios.
La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que las casas se entregarán a quienes realmente las necesitan, tras un proceso de revisión de perfiles y cotejo de datos con bases oficiales para evitar irregularidades en la asignación de los créditos.
Para Chetumal, este año se proyecta la construcción de 658 viviendas, mientras que a nivel estatal la cifra asciende a 2,600. La meta para 2030 es alcanzar 43,000 casas. La primera remesa se construirá en condominios detrás de la antigua terminal de Chetumal.
En 20 días se dará a conocer el padrón de beneficiarios, contado a partir del cierre del registro el 15 de agosto. En promedio, se inscribieron entre 300 y 500 personas por día.

