CANCÚN, QR.- El sector más afectado por una alimentación deficiente,el consumo abundante de azúcares y alcohol, que incide en desarrollar cirrosis hepática, son los albañiles o personas que trabajan en la industria de la construcción, manifestó José Prado, director de Centros de Integración Juvenil a nivel nacional.
“Estamos hablando de cirrosis hepática, particularmente entre personas de la industria de la construcción se ha encontrado que hay mayor incidencia”, destacó el entrevistado.
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Invierten albañiles su dinero en alcohol
“En los municipios vive la población indígena; viajan a trabajar de lunes a sábado y les pagan el fin de semana y ya no regresan a dejar el dinero, lo consumen fundamentalmente en alcohol”, añadió.
En el último año, en Quintana Roo se reportaron 107 casos de cirrosis, 88 en hombres (82.2 por ciento) y 19 en mujeres (17.8 por ciento).
Dijo que explicó que existen políticas públicas muy importantes para reducir el consumo de alcohol y tabaco, como el aumento de precio, aunque son sustancias elásticas, que van a disminuir de precio y posteriormente subir; este tipo de medidas beneficia en privarse del consumo a la población con menos recursos y a los menores de edad.
“Aquí también entran otras situaciones, como el alcohol adulterado que se pone a disposición de la gente a un precio más accesible y muchas veces causa un daño mayor; sobre todo si se adultera con alcohol metílico es neurotóxico, te quedas ciego o con graves problemas mentales”, recalcó.
La cirrosis hepática, dijo, es la formación grave de cicatrices en el hígado, a causa de afecciones como la hepatitis o el alcoholismo crónico.
