CHETUMAL, QR.- El autismo en Quintana Roo afecta a uno de cada 60 niños y no existen instituciones públicas adecuadas para atender a las personas con este padecimiento también conocido como Trastorno del Espectro Autista (TEA).
Padres con menores afectados por autismo en Quintana Roo se ven obligados a recurrir a médicos y escuelas privadas para buscar que sus hijos se desarrollen en diferentes ámbitos.
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Ricardo Adolfo Jesús Rivas, presidente de la Red de Padres con Hijos con Autismo de Chetumal, señaló que es lamentable que no se haya podido establecer los espacios de calidad y especializados para brindar ayuda a las personas que padecen autismo en Quintana Roo.
Insuficiente atención al autismo en Quintana Roo
Agregó que lo poco que hay está enfocado al sector infantil, en la adolescencia y la adultez son los padres los que tienen que lidiar completamente con sus hijos.
Dijo que en Chetumal solo se cuenta con un Centro de Atención al Autismo, que depende del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), pero que no reúne los parámetros de atención.
Señaló que al centro acuden 130 niños, pero la atención debe ser personalizada y eso no ocurre. “Una mala atención no es sinónimo de atención”, enfatizó.
Añadió que en los centros de autismo en Quintana Roo se sigue aplicando una teoría obsoleta basada en culpabilizar a la mujer de ocasionar el TEA por no falta de amor o de conexión con el niño o niña desde el embarazo, lo cual consideró incorrecto a todas luces.
Destacó que no es gratuita la atención y se pagan cuotas que van desde los 200 pesos hasta los mil 500 mensuales. Aunque también hay la opción de pago por cada atención o terapia, al menos una vez a la semana, que es arriba de 100 pesos la hora. Las terapias que se otorgan a los niños son física, ocupacional, comunicación, psicología y de educación especial.
apuntó que en el sector privado van de 250 a 400 pesos las sesiones terapéuticas y el cobro de consulta por un neurólogo pediatra es en promedio de mil 200 pesos. En este ultimo caso las citas pueden ser semanales, quincenales, mensuales, trimestrales y seis meses, o más, según las condiciones del paciente.
Señaló que, en su caso, cuenta con tres hijos con TEA y que recientemente se salió del centro, al reiterar que las condiciones no son óptimas.
Informó que sus tres hijos van a la escuela; uno de 26 que va a la universidad, otro que va en la primaria y una más en prescolar. El que tiene mayor complicación en términos de aprendizaje es el de educación superior, por el tema de la capacitación del personal docente.
Reveló que las cifras más conservadoras señalan que en Chetumal hay entre dos mil y tres mil niños con este trastorno, que no son atendidos y que las instancias públicas no están atendiendo de forma adecuada desde el diagnóstico. Se calcula que la tasa de autismo en Quintana Roo es de uno de cada 60 niños, misma cifra que aplica para Chetumal.
Resaltó que para diagnosticar a una persona con TEA en costo es de aproximadamente cinco mil pesos. La atención es otro costo.
Comentó que los 90 integrantes de la Red han optado una atención en instituciones privadas que, aunque tampoco son muchos, brindan mayor atención.
Jesús Rivas manifestó que atención estos momentos del autismo en Quintana Roo sólo abarcan la edad infantil y, si acaso, hasta la educación básica, aunque en el Centro de Atención de Autismo del DIF comenzaron a tomar como parámetro para darlos de alta cuando empiecen a hablar.
La situación, aseguró, pone en aprietos a los padres de familia, quienes tienen que ver cómo conseguir atención profesional para sus hijos, no sólo para su padecimiento, sino en los ámbitos escolar y laboral.
Por todo lo anterior La Red de Padres de Hijos Con Autismo está buscando establecer un “Protocolo de Actuación”, con el objetivo de detectar, atender y evaluar las personas desde temprana edad, además de darles el seguimiento respectivo. Mencionó que para ello se debe contar con personas capacitadas y certificadas.
Además se pretende realizar a mediados de año una cruzada para la detección y atención de la neurodiversidad, para que no se busque solo el TEA sino todos los trastornos que afecten a las personas.
¿Qué es el TEA?
La especialista y terapeuta ocupacional, Paola Monserrat Cortés Rodríguez, quien definió el Trastorno del Espectro Autista como un trastorno neurobiológico que causa problemas en la interacción social y en el lenguaje, en una conferencia realizada en el Congreso del Estado “Mirando el Autismo con otros Ojos”.
Entre los mitos del padecimiento, dijo, están que es causado por las vacunas y por falta de afecto de la madre. En cuanto a los mitos relacionados con el comportamiento o la sensibilidad los principales son: que viven en su mundo; son incapaces de sentir o brindar afecto; incapaces de aprender; y que todas las personas con autismo son genios.
La terapeuta señaló que el autismo en Quintana Roo es más común que el cáncer infantil, la diabetes juvenil y que el Sida pediátrico.
Coincidió en que se estima que uno de cada 60 niños presenta autismo en Quintana Roo, aunque hay otras que establecen que es uno de cada 100 infantes. La proporción de niños que padecen este trastorno con respecto a las niñas es tres a uno.
Posibles factores del padecimiento:
-Genéticos
-Neurobiológicos
-Ambientales (alimentación y contaminación)
Señales de alarma en niños:
-No compartir sus intereses y no les gusta la actividad social, no sonríen
-Niños de más de un año que comenzaron a decir algunas palabras y dejaron de hacerlo
-No miran de frente
-No voltean cuando se les habla
-No emiten frases de dos palabras a los 24 meses
-Apego inusual a un objeto
-No señala objetos con el índice
-Dificultades para hablar
-Resistencia a los cambios
-Problemas de alimentación
-No tiene noción del peligro
El diagnóstico, mencionó, necesariamente tiene que ser a cargo de un especialista y que inicia con historial clínico, observación inicia, evaluación del desarrollo y hasta estudios neurológicos y genéticos.
Es importante el diagnóstico por que se puede confundir con otros trastornos como el de lenguaje, conducta, aprendizaje o Trastorno del Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
Cortés Rodríguez subrayó que para su atención se debe brindar terapias psicológicas, de lenguaje, ocupacional y en algunos casos física. Los familiares también deben acudir con el especialista, sobre todo con el psicólogo.
La atención inicial para los niños con autismo en Quintana Roo debe ser individualizada en un primer momento, para conocer situaciones específicas de cada niño y con base a ello bridar el apoyo que requieran.
El único Centro de Atención de Autismo en Chetumal se estableció gracias al impulso de la Red de Padres de Niños con Autismo, en el sexenio pasado y se ubica en la calle Luis Cabrera entre Héroes y Calzada Veracruz.