CIUDAD DE MÉXICO.- A través de una columna en El Financiero, la periodista Lourdes Mendoza, destapa la serie de atrasos e irregularidades que presenta el Tren Maya desde el 2020.
La causa, promesas imposibles de cumplir de un proyecto ejecutivo, a cambio de millones de pesos de manera mensual, mismos que no se han pagado conforme a lo establecido.
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ICA, Grupo Indi, Mota Engil y CICSA, son los consorcios en cargados de cada uno de los cuatro tramos del Tren Maya. Ésta última, es la que más atrasos presenta desde diciembre de 2020. Además, destaca la “pésima planeación” hecha por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), al no considerar los efectos ambientales, arqueológicos y de ordenamiento territorial.
Tramos del Tren Maya, sin estar listos desde agosto
De acuerdo con Mendoza, los proyectos ejecutivos debían estar terminados en agosto, tramos 1 y 2; septiembre el tramo 3 y diciembre el tramo 4, del año pasado; sin embargo, el portal del Tren Maya señala que el más avanzado lleva 69 por ciento a diciembre de 2020.
Ante la falta de actualización de Fonatur para transparentar los avances contractuales, la periodista de El Financiero recurrió a la página de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para verificar los montos pagados al primer trimestre de 2021.
“Revisé los montos a erogar por contrato y determinar los atrasos que existen.
Según los datos, en el primer trimestre se debería tener un monto de obra aproximado (incluyendo el proyecto ejecutivo) de 23,157.6 millones de pesos, sin IVA, pero solamente se han realizado 5,126.0 millones, que es equivalente al 22 por ciento”, señaló.
Otro punto que destaca, es la todavía participación del grupo CICSA e ICA en la construcción del Tren Maya, pese a que son empresas involucradas en el mantenimiento de la Línea 12 de la Ciudad de México, la cual colapsó a mitad de vía, dejando decenas de muertos y heridos.
“El contrato de CICSA de Slim es por 18 mil millones de pesos, mientras que el de ICA fue adjudicado por 28 mil millones de pesos”, detalla.
Para la periodista, el proyecto del Tren Maya cada día se “descarrila” más.