CANCÚN, QR.- A un año de iniciada la pandemia por Covid-19, de los 416 hoteles registrados ante la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, más de 250 de ellos se mantienen cerrados, lo que representa una ocupación promedio de 26% desde el arranque de este año.
De acuerdo con el dirigente hotelero de la región, Antonio Chaves Palomo, actualmente hay disponibles 26 mil habitaciones de hotel, lo que representa poco menos del 50% del total, 57 mil.
También te puede interesar: Mañana inicia la jornada de vacunación anticovid, en Chetumal
Además, en Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, 17 hoteles siguen cerrados, lo que sumados acumulan 2 mil 462 habitaciones, más las 8 mil 500 de la Riviera Maya, dan un total de 10 mil 962 habitaciones no disponibles en la zona norte de Quintana Roo. Además, no tienen fecha para abrir.
Chaves Palomo, explicó que estas cifras se traducen a unas 20 mil personas que no han recuperado sus empleos, sólo en el ramo de la hotelería.
Hoteles prefieren continuar cerrados
El panorama empeora al saber que, tras la reapertura paulatina en junio del 2020, las tarifas de los hoteles tuvieron que rebajarse hasta 60% para poder atraer parte del mercado turístico perdido por la pandemia.
Roberto Citrón Gómez, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres (AHCPMIM), indicó que pese conseguir un 60% de ocupación hotelera, los empresarios del sector, seguían sin ver ganancias, pues las rebajas en las tarifas sólo permitieron cubrir los gastos operativos, en algunos casos.
De ahí, que muchos hoteles se mantengan con las puertas cerradas, aún con el semáforo epidemiológico amarillo, ya que los niveles de ocupación por debajo del 40% y las limitantes de aforo en los inmuebles, hacen que la reapertura sea más costosa que mantenerse cerrados, explicó el empresario hotelero.
Tercera ola de Covid-19 tras Semana Santa.
Citrón Gómez espera que la ocupación hotelera en sus inmuebles logre repuntar por arriba del 55% de ocupación, sin relajar las medidas sanitarias para evitar contagios.
Sin embargo, la Secretaría de Salud federal, prevé que tras la Semana Santa, el problema del Covid-19 podría agravarse y desatar una tercera ola, si se relajan los protocolos sanitarios.