David Acosta | R360
CHETUMAL, Q.Roo.- Con cubrebocas y acompañadas de sus padres, una niña de tres y otra de cinco años, llegaron al Congreso del Estado para solicitar apoyo. Desde hace un año enfrentan cáncer en la sangre y requieren de toda la ayuda posible, pues aún faltan dos años más de tratamiento.
La sesión de la Diputación Permanente fue convocada a las 12:00 horas de este martes, sin embargo como ya es costumbre algunos diputados no habían llegado.
En tanto iniciaban los trabajos legislativos, dos familias llegaron al edificio del Poder Legislativo. Preguntaban por algún diputado en busca de apoyo, les permitieron pasar al área de cubículos.
Dieron con el congresista Emiliano Ramos Hernández, comentaron a sus asistentes su situación e hicieron antesala. Cada familia tenía una niña con cubrebocas.
Ya era las 12:29 horas, el presidente de la Gran Comisión, Eduardo Arcila, pasó junto a las familias y se dirigió a la sala de comisiones Constituyentes del 1974; llevaba prisa pues tenía que sacar la sesión y trasladarse al municipio de Felipe Carrillo Puerto, para una reunión con representantes taurinos y galleros, en busca de revertir la Ley de Bienestar Animal que prohíbe peleas de gallos, corrida de toros y actividades de entrenamiento de animales para espectáculos.
La sesión fue instalada formalmente a las 12:35 horas, con quórum de cinco diputados Martínez Arcila, José Luis González Mendoza, Cady Ayuso Achach, Yamina Rosado Ibarra y Javier Padilla Balam, ninguno vio o se interesó por las familias que aguardaban por ayuda.
En el caso de los otros dos integrantes Carlos Mario Villanueva y Ramos Hernández, el primero no llegó al Congreso del Estado y segundo, ocupado en su cubículo por lo que no participó en la sesión.
Había prisa por terminar la sesión aunque fueron nueve puntos del orden del día, entre ellas una minuta de decreto y tres iniciativas enviadas a comisiones.
El punto seis llamó la atención, nadie se fijó en las familias que aguardaban por apoyo, pero ingresaban una reforma a la Ley de Salud del Estado encaminada a brindar una mejor atención social.
La sesión solamente duró 11 minutos: fue clausurada a las 12:46 horas y la indiferencia empeoró, pues los legisladores volvieron a pasar junto de las familias y una vez más nadie las tomó en cuenta.
La madre de la niña de cinco años informó que debido a sus condiciones económicas ha tenido que desfasar el tratamiento de su hija. Asegura que el gasto es mucho, pues viene del municipio de José María Morelos y tiene en calidad de préstamo una casa en donde solo paga el servicio de agua, pero ya no le alcanza ni para ello. Las quimioterapias son tan fuertes que han inflamado el hígado de su niña, por lo que a veces tiene que pasar varios días en la ciudad.
En cuanto a la madre de la niña de tres años, señaló que a su hija se le paralizó el intestino como consecuencia del tratamiento. Los medicamentos afectan su condición inmunológica, por lo que renta una casa donde permanecen a veces por semanas en tanto regresan a Cancún.
Debido a que ambas niñas llevan un año de tratamiento y aún faltan dos a cada una, las familias se quedaron hasta ser atendidas y posteriormente se retiraron de la sede del Poder Legislativo, no sin antes señalar que padecen en ocasiones de insumos para atender las enfermedades de sus hijas en el Hospital General de Chetumal, en donde se ubica la Clínica del Niño, Niña y Adolescente con Cáncer.
