Jazmín Ramos | R360
CANCÚN, QRoo.- La contracción de la industria de la construcción tanto de infraestructura como de vivienda y el estancamiento del sector inmobiliario mantiene cautelosos a los empresarios del ramo en Quintana Roo con respecto a las perspectivas del 2020, esperando que las condiciones mejoren al definirse las reglas del gobierno federal en materia de obra pública, el Plan Nacional de Vivienda (PNV), los nuevos esquemas de financiamiento del Infonavit y la reducción de las tasas de interés en el sistema bancario.
Datos de los resultados de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC) del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI), refieren que durante el primer semestre del 2019 la producción generada por las empresas del ramo diminuyó 1.5 por ciento acumulando para el final de año, una variación negativa del 11.2 por ciento anual, la peor desde el 2001.
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Manuel Moguel Manzur, vicepresidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en el estado, explicó que el 2019 fue un año muy difícil toda vez que la obra pública prácticamente se cayó por la forma en como trabaja ahora la administración central, obligándolos a enfocarse en el sector privado y en el caso de Quintana Roo, se concentraron en el área turística y comercial, evitando un contracción mayor.
Refirió que afortunadamente la efervescencia económica que tuvo la entidad los mantuvo, pues a nivel nacional el valor de la producción de las empresas presentó una disminución hasta del 1.5 por ciento, una situación muy complicada que afectó incluso las fuentes de empleo que genera la industria, de ahí que están a la expectativa de como se aplicarán las reglas en materia de infraestructura y la obra civil.
“El 2020 lo vemos complicado, con respecto a la obra pública no nos ha incluido el gobierno federal sobre todo a las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes). Sólo en el sector educativo que es donde se tuvo una mayor demanda, ahora los padres de familia y los docentes son quienes asignarán las obras, entonces aún no se sabe cuál será el mecanismo para ello”.
En cuanto a otros rubros como ampliación de calles y obra civil, en 2019 no se tuvieron proyectos importantes, fue mínimo beneficiando a las grandes desarrolladoras, por lo que no se pudo competir, de tal forma que se concentraron en la industria turística, así como comercial, es lo que los mantiene y en 2020 habrá esa misma tendencia.
“Aquí, lo importante es que el gobierno federal defina las reglas de cómo se va trabajar en la industria, porque no se tiene claro como se va a desarrollar la infraestructura urbana o la obra civil, de tal suerte que eso nos impide hacer una proyección real, lo que se busca es evitar que siga la caída de la producción de las empresas del ramo y continuar siendo competitivos para mantenernos en el mercado, así como las fuentes de empleo”.
En contraste, la firma de análisis económico e industrial Forescastim, indicó que de concretarse la derrama prevista para el 2020 con relación al Acuerdo Nacional de Infraestructura, se tendría un alza en el Producto Interno Bruto (PIB) en obras civiles lo que podría incluso lograr un incremento hasta el 4% del sector, luego de una severa contracción que se arrastra desde el 2018.
De hecho el gobierno federal y la Iniciativa Privada (IP) ya presentaron el primer paquete del plan, que incluye 147 proyectos que se ejecutarán durante el sexenio y solo para el 2020 se espera una derrama de 413,300 millones de pesos en obras referentes al transporte, telecomunicaciones, turismo, agua y saneamiento.
SECTOR VIVIENDA
En cuanto al sector vivienda el 2019 cerrará con una fase negativa al caer un 20% la construcción y colocación de unidades con respecto al año pasado, esta tendencia generó una contracción en la industria, tan es así que datos centrales de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) indican que el ejercicio fiscal que está por concluir producirá 285,000 casas menos contra unas 325,000 del 2018.
Según las tendencias del mercado, la vivienda media y residencial fueron las menos afectadas, mientras que las unidades residencial plus se estancaron y las casas de interés social tuvieron su peor colocación, por lo que se espera finalizar con un decremento que originó una tendencia negativa en la construcción del 1.5%, afectando unos 550 mil empleos en todo el país.
Al respecto el presidente de la Canadevi en Quintana Roo, Ari Adler Brotman, refirió que no existe una expectativa alentadora para el sector en virtud de que enfrentaron un 2019 con una baja colocación de unidades producto de varios factores: El primero, la eliminación de los subsidios, luego el alto costo de la tierra, el tema regulatorio, lo caro de la mano de obra y la incertidumbre que generó el hecho de que el gobierno federal postergará el PNV.
Mencionó que aun cuando Quintana Roo es de los pocos estados del país con menor decremento, esto derivado de la actividad turística, también cerrarán a la baja con un 12% menos que el ejercicio fiscal 2018, ya que se dejaron de construir unas cinco mil viviendas, lo que significa un duro golpe para los desarrolladores pues no lograron completar sus metas estimadas para el 2019.
Con relación a la expectativa del 2020, el empresario consideró que no se vislumbra a corto plazo una mejoría, pues el hecho de que no estén definidas aún las reglas del PNV, el sector está limitado ya que al reducirse los subsidios, (“los cuales no volverán”) los dejan prácticamente fuera del mercado, pues el 50% de la demanda corresponde a las casas de interés social y ese segmento redujo sus posibilidades hipotecarias.
Adler Brotman comentó que si el gobierno federal los deja trabajar, quita los obstáculos, define planes concretos y los favorece el PNV, podrían recuperarse hasta en un 20 por ciento, lo cual no es gran cosa porque desde el 2018 cayeron un 40 por ciento, pero al menos obtendrán la mitad de la colocación de vivienda que se tenía anteriormente, aunque todavía existe la incertidumbre con relación a las nuevas reglas y así no se pueden hacer las planeaciones para desarrollar lo que no se hizo en 2019.
“Somos una industria anticíclica que tiene cientos de miles de empleos, moviendo 37 de los 43 sectores económicos del país y del estado, ejemplo de ello es que los afiliados a la Canadevi aportan el 6 por ciento del PIB del país, es un sector prioritario, no obstante está contraído por la incertidumbre que genera el gobierno federal”
A diferencia de lo declarado por el presidente de la Canadevi, el economista Esteban Genchi Ozuna, mencionó que si bien hay una contracción en la colocación de vivienda nueva, las condiciones cambiarán para el 2020 toda vez que la Federación establecerá nuevas reglas para las líneas de crédito sociales y las líneas bancarias hipotecarias comenzarán a ajustar las tasas del Banco de México (Banxico).
Comentó que esto permitirá incentivar la demanda crediticia para adquirir vivienda el próximo ejercicio fiscal, de hecho el banco Santander ya anunció un línea financiera hipotecaria con tasa de interés anual fija de 7.99 por ciento, en tanto que Banorte informó que redujo su tasa de interés al crédito del 9.25 al 8 por ciento, una de las más bajas en el mercado nacional en los últimos 20 años.
Con ello se espera que el sector de la vivienda crezca un 4 por ciento anual a partir del próximo año, pues además se sumarán otros factores como el PNV, así como el reciente acuerdo con la IP, en el que se proyectaron ya las obras de infraestructura urbana y civil del sexenio.
SECTOR INMOBILIARIO
En el caso del sector inmobiliario a nivel nacional, el cual también sufrió una contracción, se estima una mejora para el próximo ejercicio anual por factores como la estabilidad del peso, la reducción de las tasas de interés, el nuevo esquema del Infonavit y los programas nacionales de vivienda, lo que podría generar un crecimiento entre el 2.5 al 3 por ciento.
Ante ello, las proyecciones de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), son optimistas por la suma de los factores antes mencionados y en particular en Quintana Roo, cuyas ventas y rentas de vivienda se mantuvieron sobre todo en los rubros comercial y turístico, así como en la colocación de unidades media y residencial, esperan un excelente año.
En ese sentido, la ex presidenta de la AMPI en Cancún, Tayde Fávila Soriano, comentó que a pesar que el 2019 no se tuvo un crecimiento sostenido, el sector se mantuvo sobre todo en lo referente a la renta y venta de vivienda media, así como residencial, además tuvo una buena respuesta por parte del segmento corporativo en virtud de que Quintana Roo sigue siendo atractivo para la apertura de nuevos negocios.
Señaló que a nivel nacional sí hubo una ligera contracción por las condiciones actuales del mercado y la incertidumbre que generaron las políticas del gobierno federal, pero afortunadamente en la entidad se mantuvieron las ventas, lo cual fue positivo, pues no cayó la actividad, quizás fue más complicado concretar las transacciones pero culminarán con números estables.
“Este año (2019) lo cerramos con muchas expectativas, tenemos una sobreoferta, pero el crecimiento económico en Quintana Roo se mantuvo y eso nos ayudó, donde sí se presentaron problemas fue en el segmento de unidades de interés social por el tema de los subsidios, pero confiamos que ahora con el PNV, las reducciones a las tasas de interés de los créditos bancarios hipotecarios, los ajustes la Ley de Asentamiento y los nuevos esquemas de financiamiento del Infonavit, podamos crecer hasta un 3%”.
Fávila Soriano comentó que siempre al inicio de año las ventas y rentas en el estado tienen un repunte, ya que es común que lleguen nuevas familias a Cancún, así como gente que busca emprender negocios, entonces eso los tiene optimistas, además de que en el sector se están haciendo bien las cosas, por lo que se espera un buen inicio de año.
“Cancún sigue siendo un buen lugar para vivir y para invertir; en el AMPI estamos listos con inventarios para responder a la demanda, de hecho esperamos que en el mercado corporativo se dé un incremento significativo ante la respuesta que tuvimos este 2019”.
Referente a la renta, ese rubro tuvo un aceleramiento en lo que respecta al segmento vacacional por el hecho de que es un modelo más económico, mientras que el alquiler de largo plazo de seis a 12 meses se mantuvo, al igual que las unidades de interés medio y residencial.
Los datos del sector, tanto a nivel nacional como local, estiman para el 2020 alcanzar un crecimiento entre el 2.5 y 3 por ciento, dado que se están sentando las bases para un mayor dinamismo y el hecho de que los bancos bajen las tasas de interés es una buena señal.
Las proyecciones en el estado refieren incluso que se tendrá una inversión de 2 mil millones de peso básicamente en el sector turismo y comercio.
EL INFONAVIT
En lo referente al crédito para el sector de interés social el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), contempla un 2020 muy dinámico gracias a los nuevos programas de líneas crediticias cuyo objetivo principal será facilitar la liberación de hipotecas que respondan a las necesidades de la fuerza laboral.
Informes oficiales del Infonavit muestran que las perspectivas se enfocan básicamente en tener eficiencia en el gasto, mayor transparencia en las contrataciones, además de una atención incluyente para los derechohabientes, lo que podría significar alcanzar un crecimiento anual del 4%, si las condiciones económicas y la inflación mantienen su estabilidad.
Las estimaciones del Infonavit van centradas en lo que serán los nuevos programas, destacando el rescate de la vivienda abandonada, así como los esquemas de financiamiento que permitirá a los trabajadores adquirir una vivienda adecuada y de mayor calidad.
Entre estos esquemas se encuentran Únamos Créditos, el cual permitirá a dos personas unificar sus líneas financieras a efecto de generar un patrimonio de mayor valor, para ello los dos tendrán que ser derechohabientes en activo del instituto. Este tipo de crédito estará listo a partir de enero y en un futuro se planea que hasta tres individuos puedan juntar sus financiamientos.
Otro programa es Empleo Temporal, con el cual se apoyará a los trabajadores eventuales, quienes generalmente se emplean por unos meses y después dejan de cotizar; aquí se trabajará junto a la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) a fin de contemplar el seguro de crédito de la vivienda cubriendo los riegos en las temporadas de inactividad de los derechohabientes.
También se creó el crédito Autoproducción Asistida, es aquel que ofrecerá soluciones de producción social de la vivienda mediante programas de construcción particular. A través de este esquema las familias podrán adquirir financiamiento para la autoconstrucción de vivienda con la banca.
En lo que respecta a la vivienda recuperada, el PNV indica que hasta el momento se tiene el registro de 171 mil casas que podrían recuperarse, para ello el Infonavit buscará trabajar con instituciones municipales, estatales y federales a efecto de evitar la subasta e incluso se tiene planeado crean un plan para trabajar con los desarrolladores.
Además en lo que va de la administración central, el Infonavit ha logrado reestructurar 147 mil 523 créditos de vivienda de derechohabientes que pagaban sus deudas que crecían en vez de disminuir; en algunos casos se cubrió hasta el 90 por ciento del crédito y se les condonará el resto para que puedan recibir sus escrituras, beneficiado a 31 mil familias.
